La Torre Eiffel quedó cerrada al público y las autoridades pidieron a los conductores en la región de París que se queden en sus casas por el temporal de lluvia y nieve que azota una zona de Francia poco preparada para el clima invernal.
La empresa que gestiona el monumento más visitado de Francia dijeron que la torre del siglo XIX estará cerrada el viernes y el sábado “para garantizar la seguridad de los visitantes”.
Operarios con palas retiraron a mano y con cuidado la nieve acumulada en la intrincada estructura metálica y quitaron el hielo de las escaleras y plataformas. Según explicó la compañía en un comunicado, en la torre no se puede emplear sal porque corroería el metal y dañaría los ascensores.
Una intensa nevada registrada antes esta semana dejó a cientos de conductores atrapados en sus autos y provocó los peores atascos de la historia en la región de París. La previsión meteorológica anticipa nuevas nevadas para el viernes y las autoridades emitieron avisos para casi una cuarta parte del país.