No hay crisis migratoria
Con el nuevo control de los republicanos en el Congreso de Estados Unidos (EU), la reforma migratoria está una vez más en riesgo de fracasar.
Ante recientes polémicas, como la llegada de miles de niños migrantes no acompañados y el despliegue de elementos de la Guardia Nacional en la frontera, los políticos conservadores han intensificado sus discursos antiinmigrantes.
Sin embargo, una nueva investigación de la Universidad de Rice, en Houston, muestra que no hay una crisis migratoria, como lo afirman funcionarios públicos de EU.
Pedro Pablo Cortéshttp://youtu.be/vuK8BfW_cFg
Con el nuevo control de los republicanos en el Congreso de Estados Unidos (EU), la reforma migratoria está una vez más en riesgo de fracasar.
Ante recientes polémicas, como la llegada de miles de niños migrantes no acompañados y el despliegue de elementos de la Guardia Nacional en la frontera, los políticos conservadores han intensificado sus discursos antiinmigrantes.
Sin embargo, una nueva investigación de la Universidad de Rice, en Houston, muestra que no hay una crisis migratoria, como lo afirman funcionarios públicos de EU.
La pesquisa, titulada “Migración ‘ilegal’ en la frontera EU-México: ¿es realmente una crisis?”, expone que el flujo de migrantes indocumentados está en uno de sus niveles más bajos en las última década.
El reporte informa que en el 2013 se registraron 400 mil arrestos de indocumentados en la frontera, lo que representa un decremento del 64 por ciento con respecto al 2004, cuando se reportaron alrededor de un millón 100 mil detenciones.
Tony Payan, coautor de la investigación y director del Centro México del Instituto Baker de Política Pública, afirma en entrevista con Reporte Indigo que estas cifras reflejan que hay un menor número de personas que intentan cruzar a EU.
Esto, precisa, debido a la recesión económica de ese país y al mayor número de agentes fronterizos, que del 2004 al 2013 pasaron de ser 9 mil 506 a 18 mil 611 elementos, un aumento de casi 50 por ciento.
“La realidad es que no hay una crisis migratoria, no estamos ante una ola migratoria, ni dentro de Estados Unidos ni en la frontera”, enfatiza Payan.
“La crisis es qué hacer con los residentes indocumentados que tienen familias en Estados Unidos, qué hacer con ellos que ya tienen hijos, que tienen aquí muchos años y que ya han trabajado. Ellos viven su crisis personal, ellos viven su propio drama”.
‘Flujo negativo’
Otro factor a considerar, indica Payan, es que en el 2008 el número de indocumentados que residían en EU era mayor a los 12.5 millones, mientras que ahora es menor a los 11 millones debido a las deportaciones del Gobierno federal.
“La migración indocumentada hacia Estados Unidos es cero o incluso negativa”, asegura, “porque tenemos que comparar los números de los que están siendo arrestados, que yo creo, por el control operativo en la frontera, son la mayoría ya.
“Y si consideras que estamos expulsando un número similar de residentes indocumentados, entonces no existe una crisis”.
Menos bebés, menos mexicanos
William Gruben, coautor del estudio e investigador de la Reserva Federal del Instituto de Globalización y Política Monetaria de Dallas, sugiere que hay una correlación entre la reducción de la natalidad en México y el menor número de migrantes.
Gruben destaca que, aunque Guatemala, Honduras y El Salvador tienen una población mucho menor que la mexicana, sus altos índices de fertilidad propician que ahora haya más inmigrantes de esas naciones que de México.
“La tasa de fertilidad en Guatemala (4 nacimientos por mujer) es todavía dos veces más grande que en México y por eso hay un mayor flujo de jóvenes saliendo de Guatemala que saliendo de México”, detalla.
Cuento político
Gruben manifiesta que su investigación exhibe que la noción de que existe una crisis de migración es un invento de algunos políticos republicanos.
“A pesar de lo que dicen los políticos, o a lo mejor los políticos republicanos, el nivel de las aprehensiones es 41 por ciento menos que en el 2005 y por eso, para mí, los cuentos que dicen los políticos, son cuentos falsos”, subraya.
El académico narra que sostuvo hace poco una reunión con legisladores de los estados fronterizos de México, quienes se sorprendieron.
Tony Payan coincide en que hay una falsa narrativa.
“Es una ala del partido republicano que piensa que todavía hay capital político por cobrar en crear un pánico moral público alrededor de la frontera y de los migrantes”, argumenta.
“Pero cada vez la población ve esto con más escepticismo y ya se detecta fatiga”.