No a la explotación
Fiel a su estilo, el Papa Francisco dio otro mensaje que condena los males del modelo económico mundial.
En un discurso titulado “No más esclavos, sino hermanos y hermanas”, que será difundido el 1 de enero, el Papa dirá que pese a la crisis financiera, los consumidores deberían pensarlo dos veces antes de comprar “artículos que podrían haber sido producidos con la explotación de otros”.
Por su parte, las compañías “tienen un deber de estar atentos a que formas de subyugación o tráfico de personas no formen parte de la cadena de distribución”.
Indigo StaffFiel a su estilo, el Papa Francisco dio otro mensaje que condena los males del modelo económico mundial.
En un discurso titulado “No más esclavos, sino hermanos y hermanas”, que será difundido el 1 de enero, el Papa dirá que pese a la crisis financiera, los consumidores deberían pensarlo dos veces antes de comprar “artículos que podrían haber sido producidos con la explotación de otros”.
Por su parte, las compañías “tienen un deber de estar atentos a que formas de subyugación o tráfico de personas no formen parte de la cadena de distribución”.
Su mensaje, publicado por el Vaticano ayer, condena “el creciente flagelo de la explotación del hombre por el hombre”, un “fenómeno abominable” que cubre todo, desde la prostitución forzada hasta los niños soldados y el trabajo esclavo en las fábricas”.