Nueva York, con mira en su nueva gobernadora Kathy Hochul
Luego de darse a conocer que Kathy Hochul será quien esté al frente del gobierno neoyorquino, los ciudadanos de este estado deberán ir analizando quién podrá ser su próximo líder político en 2022, un papel que puede conservar la demócrata siempre y cuando sepa manejar la crisis económica y sanitaria
Fernanda MuñozLos neoyorquinos están viviendo una de las etapas políticas más difíciles para su estado. Con la dimisión de su gobernador, Andrew Cuomo, y el relevo que le dará la vicegobernadora, Kathy Hochul, su futuro aún es incierto.
Tras el retiro de Cuomo por acusaciones sexuales, Hochul declaró que representará a Nueva York a partir de los siguientes 14 días y hasta 2022, cuando se supone que iba a terminar el periodo del demócrata. De ahí en adelante, los neoyorquinos tendrán que decidir quién será su próximo líder político.
“Estoy de acuerdo con la decisión del gobernador Cuomo de haber dado ese paso. Es lo correcto y lo mejor para los intereses de los neoyorquinos. Como alguien que ha servido en todos los niveles de gobierno y al ser la siguiente en la línea de sucesión, estoy preparada para liderar como la 57º gobernadora del estado de Nueva York”, declaró Kathy Hochul.
I agree with Governor Cuomo’s decision to step down. It is the right thing to do and in the best interest of New Yorkers.
As someone who has served at all levels of government and is next in the line of succession, I am prepared to lead as New York State’s 57th Governor.
— Kathy Hochul (@LtGovHochulNY) August 10, 2021
Ante esto, es el maestro Óscar Abad, académico e internacionalista de la UNAM, quien asegura que es la aún vicegobernadora quien podría tener una oportunidad para continuar siendo la máxima representante de Nueva York y reelegirse para 2022, pues tiene diferentes puntos a su favor.
“Sería muy bueno que sea la vicegobernadora quien tome el cargo, porque podría darle continuidad al Partido Demócrata en Nueva York, seguir con la buena gestión administrativa que ya se tenía en materia sanitaria, y representar al poder femenino (…) Además, su género le da un buen bonus político para gobernar”, asume el también catedrático de la Universidad Anáhuac.
Por su parte, la maestra Raquel Saed, especialista en política y medios de Estados Unidos de la Universidad Iberoamericana, comenta que otras opciones para competir por la gubernatura del estado son Bill de Blasio, actual alcalde Nueva York, o la congresista Alexandria Ocasio-Cortéz, dos políticos que estuvieron a favor de la renuncia de Cuomo.
“La dimisión del gobernador Cuomo era necesaria desde hace mucho tiempo. Pero aún queda trabajo por delante para revertir las formas en que nuestras instituciones fueron moldeadas durante años para maximizar la impunidad y la falta de transparencia para que estos abusos se desarrollaran como lo hicieron”, llegó a declarar la congresista, en referencia a los 11 casos de acoso sexual en contra de Cuomo.
When abusers of power blame everyone else for “misunderstanding” their abuse, it is often a way to gain sympathy from those who’ve ever been / could be involved in a misunderstanding.
But the intentional environment of fear & intimidation harassers create is far from a mistake.
— Alexandria Ocasio-Cortez (@AOC) August 10, 2021
De acuerdo con la maestra Saed, sería Ocasio-Cortéz quien podría llevarse la contienda si decide participar, principalmente porque con ella continuaría el liderazgo femenino que comenzó con Kathy Hochul, y porque tiene mucha visibilidad en el escenario político de todo Estados Unidos.
Pero además esos puntos, quien sea el próximo gobernador neoyorquino también deberá seguir impulsando al estado como uno de los lugares más representativos del país al ser sede de organizaciones como la ONU, la NASA, y el lugar donde la moda, la música y el arte repuntan para ser grandes referentes mundiales.
En ese sentido, se espera que mientras termina el periodo del gobierno actual, quienes decidan participar en las elecciones del siguiente año vayan sumando puntos a favor. Como así se prevé que lo haga la vicegobernadora al reforzar el programa de vacunación contra el COVID-19 que comenzó Cuomo, y tratar de enfrentar la crisis económica que dejó la pandemia.
Sin esperanzas para Cuomo
Antes de que la Fiscalía de Nueva York diera a conocer a través de un informe que el gobernador Andrew Cuomo sí cometió acoso sexual contra varias empleadas estatales, la imagen del demócrata era destacada en todo el país, llegando a ser señalado incluso como el próximo candidato presidencial.
Sin embargo, con estas acusaciones detrás suyo, esa popularidad se desmoronó en cuestión de días, dejándolo con pocas posibilidades de volver a reaparecer en el escenario político en un futuro.
My statement on the independent investigation into the alleged sexual harassment claims against Governor Cuomo: pic.twitter.com/DfBC0xaI37
— NY AG James (@NewYorkStateAG) August 3, 2021
“¿Hay posibilidad de que regrese? Yo lo dudo. Podría tal vez aparecer en algún medio de comunicación o ser parte de una fundación que contrate políticos que ya no estén en su cargo, un revolving door, donde la gente que ha trabajado en la política entra a instituciones privadas, pero ya no tienen la luz pública encima”, comenta la maestra Raquel Saed.
Por su parte, Óscar Abad asegura que en caso de que Cuomo regrese sería porque llegó a un acuerdo con todas las mujeres que han externado una situación de abuso en su contra. Sin embargo, existe el riesgo de que alguna decida ejecutar una demanda, lo que podría llevarlo a una privación de su libertad y por ende a un alto total de su carrera política.
“Creo que lo que está sucediendo es una gran lección, porque nos hace darnos cuenta que en la política el poder debe manejarse con mucho cuidado, es una especie de explosivo que si no sabes cuidar explotará en cualquier momento, y eso le pasó al gobernador, que aunque llevaba una buena gestión, al perder los valores esenciales desde el punto de vista de lo social, ha tenido una repercusión que ha puesto en entredicho su propia carrera”, destaca.
De ese modo, se espera que el caso de Cuomo sea un ejemplo de lo que podría llegarle a suceder a quien cometa acciones de acoso y abuso sexual, sobre todo en una época en la que la voz femenina se ha robado favorablemente todos los reflectores en gran parte del mundo.