Obama se quedó sin Papa

El presidente Barack Obama tenía como virtual favorito para ser el nuevo sumo pontífice a Sean O´Malley, cardenal y arzobispo de Boston.

A Obama se le ha relacionó con el cardenal O´Malley luego de que se diera a conocer que el jefe de comunicaciones del cardenal es hermano de Tom Donilon, principal asesor de seguridad nacional del presidente de Estados Unidos.

Donilon, quien también preside el Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos, cuenta con dos hermanos en puestos de alto perfil.

Terry, un hombre laico, fue contratado por el arquidiócesis de Massachusetts para ser el encargado de prensa del cardenal Sean O´Malley, luego de que la conferencia de arzobispos estuviera inmersa en escándalos de pederastia.

El tercer hermano, Michael, es asesor de comunicación del vicepresidente Joe Biden.

Ante el trío de los Donilon, y a pesar de las diferencias ideológicas entre Obama y la Conferencia Episcopal de Estados Unidos, las condiciones estaban dadas para que la administración demócrata tuviera línea directa con el Vaticano.

La figura del cardenal Sean O´Malley fue seguida de cerca en los últimos días, ya que su nombre se encontraba dentro del grupo compacto de sacerdotes papables, del continente Americano.

Sin embargo, la llegada de un Latinoamericano al máximo liderazgo de la Iglesia Católica frenó el momentum del estadounidense.

A la salida de una más de las reuniones para negociar un acuerdo fiscal con la facción republicana en el Capitolio, Obama fue cuestionado sobre el nuevo Papa, a lo cual se mostró entusiasta y dijo que esperaba con ansias conocerlo y trabajar juntos.

Vía Twitter, Obama declaró: “Espero con entusiasmo trabajar con su Santidad para lograr avances en lograr la paz, seguridad y dignidad que todos los seres humanos necesitamos”.