Francia trazó una nueva línea en el estudio del SARS-CoV-2. Autoridades del país informaron que, al hacer un análisis sobre contagios de neumonía, se percataron que atendieron a un primer paciente con coronavirus en diciembre del año pasado.
Para representantes de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la noticia de los científicos franceses no es una sorpresa; incluso, consideran probable que puedan detectarse otros casos tempranos de Covid-19 en otras latitudes fuera de China.
Por ello, Christian Lindmeier, portavoz de la OMS, lanzó un llamado a las autoridades de salud de los diferentes países para que analicen los casos de neumonía que fueron atendidos durante noviembre y diciembre del año pasado, ya que considera que con estos datos el mundo tendrá una nueva imagen respecto al desarrollo de la pandemia.
“Los hallazgos ayudan a comprender mejor la posible circulación del virus del Covid-19 y podrían surgir otros posibles casos anteriores al analizar de nuevo las muestras”, dijo el vocero de la OMS.
En el informe, investigadores de los hospitales Avicenne de Bobigny y Jean Verdier de Bond explicaron que analizaron los test de PCR (una técnica de laboratorio que permite amplificar pequeños fragmentos de ADN para identificar gérmenes) de 24 pacientes que fueron internados en diciembre y enero con neumonía.
Los resultados arrojaron que un hombre de 52 años con coronavirus fue atendido el 27 de diciembre por síntomas de neumonía, cuando el primer caso formal fue reportado por las autoridades casi un mes después, el 24 de enero.
Medios franceses reportan que el hombre a quien se refiere esta investigación no viajó fuera del país, por lo cual descartan la teoría del virus importado, que hasta ahora es la versión que más se ha difundido por autoridades sanitarias del mundo, entre ellas la OMS.
Sobre el caso, la agencia de noticias EFE detalló que el infectado estuvo enfermo durante quince días, lapso en el cual contagió a sus hijos, pero no a su esposa, quien trabaja en una pescadería que entre su clientela tiene a un número importante de personas de nacionalidad china, situación que abre la posibilidad de que ella fuera el foco de contagio al ser asintomática.
“Identificar al primer paciente infectado es de gran interés epidemiológico, ya que esto cambia drásticamente nuestro conocimiento respecto al coronavirus y su propagación en Francia. Además, la ausencia de un vínculo con China y la falta de viajes sugiere que la enfermedad ya estaba expandiéndose entre la población a finales de diciembre “, dice la investigación.
El reporte de los hospitales en Francia da un giro a las investigaciones que hasta hoy se tenían respecto al origen del virus; sin embargo, no es concluyente para determinar que se propagó desde Francia hacia el mundo, explica Gustavo Solís, académico de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
No obstante, el académico de la máxima casa de estudios añade que serán necesarios más elementos para completar el rompecabezas de la dispersión y evolución del virus en Francia y también a nivel internacional.
En la nación europea la dispersión de contagios de Covid-19 alcanzó ya 24 mil 905 casos confirmados y 2 mil 271 víctimas mortales, mientras que las autoridades ampliaron el estado de emergencia sanitaria hasta el 24 de julio, por lo que duraría cerca de cuatro meses, dado que inició a finales de marzo.
Vacuna del coronavirus en disputa
El reporte de los hospitales de Francia llega en medio del debate de la creación del virus en un laboratorio chino, teoría que Estados Unidos ha impulsado, aun cuando expertos declaran que no existen pruebas suficientes para sustentar tal afirmación.
Tanto el presidente Donald Trump como el secretario de Estado, Mike Pompeo, aseguran tener evidencia que avala estos dichos, aunque agencias de investigación de ese país descartan esta teoría.
El mandatario también asegura que Estados Unidos tendrá una vacuna para evitar los contagios de esta nueva cepa del coronavirus antes de que termine este año, mientras que científicos chinos informan que ya realizaron pruebas de una vacuna para verificar su efectividad.
La investigación de la Academia Militar de Investigación Médica de China es liderada por la epidemióloga Chen Wei, y pese a las notificaciones de sus avances, la información no ha sido compartida con la OMS, que elaboró un plan de colaboración mundial para desarrollar lo más pronto posible el antiviral.
Aun con los avances, para la organización de la salud la vacuna estaría lista entre abril y junio del año próximo, pero para el especialista Gustavo Solís esa fecha es demasiado temprana, dado que las investigaciones en este campo suelen tardar por lo menos dos años.
“Los científicos en el mundo trabajan a marchas forzadas, pero desarrollar la vacuna es un trabajo que requiere mucho tiempo para hacer pruebas, detectar errores, y en este caso, también debe atender otras características, como que sea asequible para toda la población”, declara.