Aumentó a 158 el número de centroamericanos integrantes de la Caravana Migrante que lograron ingresar a Estados Unidos para pedir asilo.
El día de ayer 70 personas, entre ellas hombres, mujeres y niños, se les permitió atravesar la frontera entre Tijuana y San Diego, la cual divide a México con Estados Unidos, país que les negaba el acceso por mandato de su presidente Donald Trump.
De acuerdo a activistas que acompañaban al movimiento, el cual protagonizan ciudadanos de Honduras, del El Salvador y de Guatemala, aseguraron que los organizadores de la caravana fueron notificados por parte de la Oficina de Aduana y Protección Fronteriza (CBP) de que aceptarían a 70 de ellos.
A pesar de que sólo ha pasado un día de que la CBP permitió la entrada algunos de los 200 integrantes que conforma Caravana Migrante, aún permanecen en Tijuana 50 de ellos, quien se alojaron en casas de campaña.
Ante ello, los migrantes no han decaído, pues los funcionarios fronterizos del Gobierno estadounidense avisaron que permitirían el paso a todos los integrantes a través de grupos pequeños a la vez, diciendo que el transitado cruce de San Ysidro a San Diego estaba saturado, por lo que debían de ser pacientes.
Sin embargo, mientras que los migrantes de la Caravana continúan llegando las tierras estadounidenses, el secretario de Seguridad Nacional, Kirstjen Nielsen, advirtió que cualquier persona que cruce la frontera de manera ilegal, será procesada inmediatamente.
