Pide iglesia a obispos ser intermediarios en Nicaragua
El Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM), expresó su solidaridad con el pueblo de Nicaragua y llamó a la Iglesia presente en el continente a rezar por este país el domingo 22 de julio “en todas nuestras celebraciones”
Rubén ZermeñoObispos de América Latina y El Caribe expresaron su solidaridad con el pueblo de Nicaragua y con sus compañeros religiosos por la ola de violencia generada por las represión del presidente Daniel Ortega y que ha dejado a más de 270 personas sin vida.
“Como servidores del Evangelio de Jesucristo para la esperanza del mundo, expresamos nuestra cercanía y solidaridad con el pueblo Nicaragüense y con sus pastores profetas de justicia, ante la dramática y dolorosa crisis social y política que allí se vive actualmente”, señala la carta firmada por el Cardenal Rubén Salazar, Arzobispo de Bogotá y por el Juan Espino Obispo Auxiliar de Morelia.
En la misiva, dirigida a los obispos de Nicaragua les pide ser la voz de quienes no tienen voz para hacer valer sus derechos y encontrar caminos de diálogo para instaurar la justicia y la paz.
“Para que en Cristo, todos tengan vida de modo especial, quienes se sienten desconsolados por la muerte y la violencia. Les alentamos a seguir siendo defensores de los derechos humanos y portadores de la esperanza. Les invitamos también a no cerrar los oídos ante el clamor y sufrimiento de nuestros pueblos y a continuar siendo los líderes valerosos por medio de los cuales Dios se hace presente y guía la historia de su pueblo”, agrega el escrito.
Desde que comenzaron la represión por parte del gobierno de Ortega, los obispos han servido como mediadores y pacificadores, por su labor incluso han sido agredidos.
El pasado 10 de julio los simpatizantes del Presidente y un grupo parapolicial atacaron una iglesia en la ciudad de Diriamba.
Además los religiosos han ayudar a rescatar a cientos de estudiantes de las manos del Ejército para evitar más asesinatos.
“El próximo 22 de julio, es nuestro deseo y pedimos en todas nuestras celebraciones, en todas las comunidades creyentes de todos nuestros países, se eleve una oración especial por el Pueblo de Nicaragua”, concluye la carta.