Piden justicia a ¿injustos?
Ferguson parecía tranquilo después de haber protagonizado la semana pasada un escenario de guerra.
La muerte de Michael Brown, un joven negro, a manos de un policía de esta comunidad de Missouri había desatado fuertes encuentros entre manifestantes y policías, pues, según fuentes, el joven no estaba armado al momento de su asesinato.
El evento explotó el resentimiento hacia el racismo que aún divide a los estadounidenses.
Andrea B. Assunto
Ferguson parecía tranquilo después de haber protagonizado la semana pasada un escenario de guerra.
La muerte de Michael Brown, un joven negro, a manos de un policía de esta comunidad de Missouri había desatado fuertes encuentros entre manifestantes y policías, pues, según fuentes, el joven no estaba armado al momento de su asesinato.
El evento explotó el resentimiento hacia el racismo que aún divide a los estadounidenses.
Y a pesar de que se había calmado la situación, las nuevas declaraciones de la autopsia de Brown prendieron nuevamente el fuego en St. Louis.
Incluso, los eventos orillaron al gobernador de Missouri, Jay Nixon, a enviar contingentes de la Guardia Nacional al suburbio para calmar la situación.
“Estos actos violentos son irrespetuosos para la familia de Michael Brown y su memoria, y para la gente de esta comunidad que busca se haga justicia, y que haya seguridad en sus hogares”, afirmó ayer Nixon en un comunicado.
Asimismo, el presidente Barack Obama declaró ayer que aunque la mayoría de los manifestantes son pacíficos hay una minoría que está utilizando la violencia y esto “socava en vez de avanzar la justicia”.
Se prenden en furia
El pasado 17 de agosto significó un momento clave para la ira de los manifestantes de Fegurson.
Una autopsia pagada por los padres de Brown demostró que el joven recibió seis balazos de la policía.
“Una de las balas entró por arriba del cráneo del señor Brown, sugiriendo que su cabeza estaba inclinada hacia delante cuando le impactó y causó una herida mortal”, informó ayer The New York Times.
Según el doctor Michael Baden, encargado de la autopsia, Brown fue impactado cuatro veces en el brazo, heridas a las que el joven hubiera podido sobrevivir.
“Las balas no parecen haber sido disparadas desde cerca, porque la pólvora no estaba presente en su cuerpo. Sin embargo, esta determinación podría cambiar si resulta que hay residuos de pólvora en la ropa del señor Brown, a la que el doctor Baden no tuvo acceso”, publicó The New York Times.
Y a pesar de lo que estos resultados informen, el fiscal general de EU Eric Holder, quien viajará a Ferguson para monitorear la situación, anunció el domingo que el Departamento de Justicia realizará su propia autopsia debido a las “circunstancias extraordinarias que giran en torno al caso”.
Entre ellas se encuentra el responsable de la muerte del afroamericano: Darren Wilson.
El oficial de la policía, quien se había mantenido en el anonimato hasta ahora, habría detenido en un inicio a Brown y a un amigo porque “se encontraban caminando en el medio de la calle, bloqueando el tráfico”, indicó el jefe de policía de Ferguson, Thomas Jackson.
Esto ocurrió momentos después de que el joven y unos amigos robaran una tienda de la zona.
“El oficial no sabía del robo en la tienda cuando detuvo a Michael Brown, pero Michael Brown sabía del robo, y Michael Brown (…) prensó que estaba siendo detenido por el robo, y por ello cuando el oficial intentó meterlo en el carro por no cooperar o cualquier razón que tuviera, Brown inmediatamente empezó a forcejear”, comentó el analista legal de CNN Paul Callan.
Y aunque la familia de Brown identificó al joven en la grabación, asevera que esta estrategia intenta “asesinar la imagen de Michael”, y que es “humo y espejos” para oscurecer lo que realmente pasó.
¿Con qué moral?
El Gobierno de EU parece tener molestos no solo a los manifestantes en Ferguson, que piden policías que no asesinen a sus ciudadanos.
Los rusos salieron ahora al ataque y a tildar al país norteamericano de “hipócrita”.
“Se han posicionado como el ‘bastión de los derechos humanos’ y está constantemente comprometidos con ‘exportar la democracia’ en bases sistemáticas… Queremos aconsejarles a nuestros socios estadounidenses que pongan más atención en restaurar el orden en su propio país, antes de imponer su experiencia dudosa en otros estados”, exhortó el ministro de Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, el pasado 15 de agosto.
Y es que parece que por estar pendiente del exterior de las fronteras, el interior se salió de control.