El Gobierno del presidente Joe Biden apunta sus esfuerzos a frenar la deportación de cientos de miles de migrantes que llegaron a Estados Unidos cuando eran niños.
Dicha maniobra se adhiere a un extenso peregrinar en torno a la legalidad del programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus iniciales en inglés).
Esto, mediante una propuesta de norma con la que pretende satisfacer las inquietudes de un juez federal, que en julio pasado decretó que el programa era ilegal, principalmente debido a que el Gobierno de Barack Obama pasó por alto requerimientos procesales al momento en que el programa entró en vigor, en 2012.
La normativa es similar a la iniciativa de la era de Obama, y recrea la política de hace nueve años con el objetivo de afianzarla en una base más sólida al atravesar el proceso de regulaciones federales.
El juez federal de distrito Andrew Hanen, asignado por el presidente George W. Bush, dijo que el Gobierno de Obama excedió su autoridad y no buscó la retroalimentación adecuada; por lo que permitió que continuaran las renovaciones al programa pero prohibió las nuevas inscripciones.
La propuesta de 205 páginas solicita retroalimentación pública a fin de atender las preocupaciones de Hanen, aunque de momento se desconoce si eso será suficiente, y se publicará hoy en el Registro Federal, lo que dará lugar a un periodo de 60 días para comentarios del público, con lo cual se hace poco probable que entre en vigor durante varios meses.
El Gobierno de Barack Obama creó el DACA con un memorándum emitido por la entonces secretaria de Seguridad Nacional, Janet Napolitano. Su intención era ser una medida provisional hasta que el Congreso legislara una solución permanente, lo cual no ha ocurrido.
Debido a que el DACA no es producto de una legislación, encaja en la categoría de las políticas que pueden alterarse fácilmente con el cambio de administración, es así que el expresidente Donald Trump intentó rescindir el documento del programa y ponerle fin, pero la Corte Suprema llegó a la conclusión de que no lo hizo de forma adecuada.
Para ser beneficiario del DACA, el solicitante debe haber llegado al país antes de cumplir los 16 años, residir continuamente en Estados Unidos desde su llegada y haber estado en el país para el 15 de junio de 2012.
