Unos 300 choferes franceses protestaron ayer en París luego de reiteradas manifestaciones de taxistas contra lo que consideran laxas regulaciones de la industria que permiten operar a compañías como Uber.
Los choferes bloquearon calles en el centro de la capital francesa a media mañana, diciendo que son víctimas de discriminación oficial.
Muchos de los manifestantes tienen un estatus particular que les permite solamente llevar un mínimo de dos pasajeros, pero muchos evaden las regulaciones y usan programas como Uber para recoger a pasajeros individuales.
La semana pasada, el gobierno prometió a los taxistas que las compañías entregarían información sobre sus choferes en unas pocas semanas para asegurarse de que todo el mundo tiene la licencia apropiada.
Las tensiones entre taxistas y servicios de autos como Uber han aumentado en Europa, con los taxistas diciendo que los servicios basados en apps operan fuera de la ley. Francia ha modificado regulaciones para calmar a los taxistas, con poco éxito. (AP)
