Al piloto del “Solar Impulse”, André Borschberg, se le olvidó que pasó 20 horas sin dormir cuando supo que había batido el récord mundial del recorrido más largo –y sin escalas– de un avión solar.
A bordo del aeroplano, y sin compañía, el suizo viajó de Phoenix a Dallas con el objetivo de superar su marca de hace un año, cuando voló sin una gota de combustible los mil 116 kilómetros que separan a la ciudad suiza de Payerne y Madrid.
En esta ocasión, completó mil 541 kilómetros luego de 18 horas con 20 minutos.
Según reportó la agencia EFE, Borschberg dijo que esta vez fue especialmente difícil por la presencia de fuertes vientos al momento del aterrizaje durante las primeras horas de la mañana.
Este tramo es el segundo de cinco recorridos que Borschberg y el fundador del proyecto, Bertrand Piccard, tienen planeado realizar alternándose en la cabina de pilotaje para unir la bahía de California y la ciudad de Nueva York.
El llamado “Solar Impulse” es hasta ahora el único avión que funciona 100 por ciento con energía solar. En sus alas hay células fotovoltaicas donde se almacena la energía.
La distancia de ala a ala es de 64 metros y entre las dos pesan 1.6 toneladas, la mitad del peso total del aeroplano.
El costo del proyecto, desde su lanzamiento en 2004, ha sido superior a los 100 millones de euros.