Comparado con Brasil, la reacción de México ante el presunto espionaje sufrido por parte de Estados Unidos ha sido muy tibia, aunque ayer José Antonio Meade aseguró que México se siente ofendido por el asunto y por ello exigió una investigación del asunto.
Cuando se viola la ley no se piden explicaciones, se exige investigar y deslindar responsabilidades con las consecuencias a que haya lugar, y eso es lo que hizo la nación respecto al espionaje de EU al entonces candidato presidencial Enrique Peña Nieto, aseguró Meade.
En su comparecencia ante el Senado de la República, como parte de la glosa del Primer Informe de Gobierno, el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores detalló de esa manera la posición del país respecto al supuesto espionaje del que fue víctima el presidente Enrique Peña Nieto cuando era aspirante a la presidencia.
Esto en respuesta al cuestionamiento de la senadora Dolores Padierna, sobre que ante la inobservancia de la ley no caben explicaciones.
Otros de los temas polémicos en los que insistió la oposición fue el nombramiento de embajadores y cónsules, la reforma migratoria y las relaciones multilaterales del país.
(Fuente: Notimex)