¿Qué significa realmente que Trump quiera enviar militares a la frontera con México?
Aunque el presidente estadounidense aseguró que esto nunca se ha hecho, las administraciones de Bush y Obama enviaron soldados para ayudar en las labores de vigilancia en la frontera
Indigo StaffTras varios intentos fallidos del presidente Donald Trump por conseguir recursos para su muro fronterizo, el mandatario dijo este marte que usará a las fuerzas armadas de los Estados Unidos para reforzar la seguridad en la frontera… ¿qué significa esto?
Aunque las palabras de Trump hicieron mella en el gobierno mexicano, el cual pidió al presidente estadounidense explique sus palabras, ésta no sería la primera vez que un gobierno de los Estados Unidos envía militares para trabajar en la zona fronteriza.
México ha solicitado a EUA, por los canales oficiales, que clarifique el anuncio de @POTUS sobre el uso del ejército en la frontera. El gobierno de México definirá postura en función de dicha clarificación, y siempre en defensa de nuestra soberanía e interés nacional.
— Luis Videgaray Caso (@LVidegaray) 3 de abril de 2018
Sin embargo, durante la administración de George W. Bush fueron enviadas fuerzas armadas a la frontera, por medio del despliegue de efectivos de la Guardia Nacional. En 2006, por ejemplo, bajo la Operación Jump Start se enviaron 6 mil agentes para labores de vigilancia.
Para dicha operación se utilizaron agentes de la Guardia Nacional con el objetivo de ayudar a la Patrulla Fronteriza con tareas no relacionadas a la aplicación de leyes, mientras se contrataba y capacitaba a nuevos agentes; durante el segundo año la cifra de soldados bajo a 3 mil.
Esto se debe a que la Constitución de los Estados Unidos prohíbe utilizar elementos activos en este tipo de operación porque hay normas militares que prohíben que se usen los llamados soldados del Título 10 para labores policiales y similares dentro de Estados Unidos.
En el proyecto de 2006, los elementos de la Guardia Nacional fueron usados para labores de apoyo de vigilancia, comunicaciones, asuntos administrativos, espionaje, análisis e instalación de infraestructura de seguridad fronteriza, es decir, reforzamiento y colocación de vallas.
Y no sólo fue Bush, pues en 2010, el presidente Barack Obama mandó mil 200 agentes de la Guardia Nacional a la Frontera con México para apoyar el combate contra el contrabando de drogas y la inmigración ilegal, lo cual no implica acciones bélicas.
En aquella ocasión, las autoridades aclararon que los elementos de la Guardia Nacional no serían enviados al frente ni interactuarían con gente que cruza la frontera, en pocas palabras, que no serían utilizados como tropas en combate ni nada por el estilo.
No sólo el presidente tiene la facultad de mandar soldados de la Guardia Nacional a la Frontera, pues en 2014 el gobernador de Texas, Rick Perry, ordenó que dicho cuerpo, en su rama estatal, se desplegará a lo largo del Río Bravo.
Perry dijo, hace cuatro años, que la presencia de la Guardia Nacional era importante, pues supuestamente Obama no había logrado dar seguridad a la frontera; actualmente, aún permanecen 100 hombres de dicho operativo.
La única manera en que Trump podría hacer uso de los soldados registrados bajo el Título 10 es que comience un conflicto bélico con México.