El rompimiento de un dique de la empresa minera de Brasil Vale en la localidad de Brumadinho, en el estado de Minas Gerais, ha dejado hasta ahora 34 muertos, 23 personas hospitalizadas y 81 sin hogar, de acuerdo con un boletín del Cuerpo de Bomberos.
El gobierno de Minas Gerais confirmó por su parte que la primera víctima identificada es la médica Marcelle Cangussu, de 35 años, que trabajaba para la compañía, indicó la Agencia Brasil de noticias.
La presa para el depósito de deshechos de la mina de Corrego do Feijao, de la empresa Vale, se rompió en la tarde del viernes, según las primeras investigaciones, debido a la cantidad de residuos acumulados en la estructura, que fue desbordada.
La Defensa Civil de Belo Horizonte, capital de Minas Gerais, divulgó en tanto una alerta por el aumento de lluvias en la región, lo que podría agravar la situación y entorpecer las labores de búsqueda y rescate de sobrevivientes.
La Agencia Brasil precisó que los bomberos buscaban posibles sobrevivientes en un autobús y una locomotora que fueron arrastrados por la corriente, un predio cercano al restaurante de la mina, y en la comunidad vecina de Parque de Cachoeiras.
En la búsqueda participan los bomberos y socorristas, con apoyo de 14 aeronaves, entre ellas helicópteros de la Policía Militar y de la Policía Civil de Minas Gerais, y de la Fuerza Aérea Brasileña.
La empresa reportó que el dique estaba inactivo desde hace tres años, sin recibir residuos, y que sus reportes más recientes no apuntaron ninguna irregularidad, pero se abstuvo de precisar los motivos del percance.
La Defensa Civil Nacional declaró el estado de calamidad pública en Brumadinho y el Ministerio de Desarrollo Regional instaló un puesto de operaciones en el municipio, para monitorear los trabajos de rescate, la situación climática y coordinar los servicios esenciales.
Debido al percance, y a pedido del Ministerio Público, la justicia del estado de Minas Gerais bloqueó cinco billones de reales a la empresa minera, para garantizar recursos para las medidas de emergencia y reparación de daños ambientales, informó la Agencia Brasil.
La jueza Perla Saliba Brito también ordenó que Vale adopte medidas para garantizar la estabilidad de la presa VI del Complejo Mina do Feijão.
A su vez, el Instituto Brasileño de Medio Ambiente y Recursos Naturales Renovables (Ibama) impuso una multa de 250 millones de reales a Vale, como “responsable por la catástrofe socio ambiental” ocurrida en Brumadinho, de acuerdo con la Ley de Crímenes Ambientales.
Ibama acusó a Vale de provocar polución que puede poner en riesgo la salud humana, tornar un área urbana o rural impropia para la ocupación humana, contaminar el agua y provocar la interrupción del suministro del líquido, por la emisión de materiales, daños a la biodiversidad y verter deshechos mineros en recursos hídricos.