Una vez más los egipcios van un paso adelante. Esta vez, la censura derivó en creatividad.
Mosireen, un juego de palabras que en árabe significa “Egipto” y “determinado”, fue fundada a raíz de la cobertura ciudadana durante la Primavera Árabe.
Fue creado por un grupo de cineastas y activistas que se reunieron para apoyar a los medios ciudadanos e informar libremente.
“Filmamos la revolución en curso, publicamos videos que desafían las narrativas de los medios del Estado”, describe un video hecho por el colectivo.
Pero lo innovador no es solo eso. Lo diferente es que Mosireen es un espacio tanto para aprender, como para difundir y enseñar.
“Ofrecemos capacitación, asistencia técnica, equipos, organizamos proyecciones de películas y eventos”, explican en su sitio mosireen.org.
Camino al futuro
Para el colectivo, la marcha de Egipto hacia el futuro, exigida por millones cuando salieron a las calles en 2011, no acabó cuando Mubarak dejó el poder, sino que solo fue el inicio del cambio.
Es por eso que la misión de la organización apenas comienza.
Su naturaleza, sin fines de lucro y de integración de nuevas tecnologías y nuevas formas de informar, los convierte en pioneros de este tipo de activismo ciudadano.
Mosireen se financia con donaciones, en su lucha por seguir libre de ataduras.
La vuelta al mundo en megabites
En cuatro meses, y con 97 videos, el colectivo cuidadano Mosireen logró 2 millones 846 views por medio de YouTube.
Cuenta con alrededor de 10 millones de megabytes de material recolectado. Y más de 100 personas han sido entrenadas bajo el sistema de “paga lo que puedas”.
Mosireen ha sido citado por Al Jazeera, CNN, Financial Times, The New York Times, The Washington Post, theReal news network y Amnestía Internacional. Además, es el canal sin fines de lucro más visto en la historia de Egipto, y el más visto en todo el mundo durante enero de 2012.
En contra del odio digital
En su informe anual ante la Asamblea General, Mutuma Ruteere, relator especial de la ONU, pidió a los Estados aprobar leyes que combatan la propagación del racismo y la xenofobia en internet, así como evaluar los vínculos entre la difusión de estas posturas en línea y los crímenes de odio.
Expresó que entre más crece la penetración de internet en el mundo, más aumentan los sitios que promueven el odio, y más a menudo grupos o individuos extremistas usan herramientas digitales para propaganda.
Por lo que urgió a una mayor cooperación entre Estados, organismos internacionales, sector privado, sociedad civil y comunidades locales para combatir este tipo de prácticas, sin dejar de ser respetuosos de la libertad de expresión.
“Las medidas legislativas son centrales en cualquier estrategia para combatir el racismo, el odio étnico y la xenofobia”, de acuerdo con el documento presentado este lunes ante un comité de la Asamblea General.
Según la Unión Internacional de Telecomunicaciones, el número de usuarios de internet en el mundo alcanzó los dos mil 400 millones de personas en 2011. (Fuente: Notimex)