Trump: amenaza bélica sin filtros

El ataque contra Siria este fin de semana demuestra que el presidente de Estados Unidos Donald Trump es apoyado por Occidente. Este acontecimiento también revela que el mandatario estadounidense tiene el poder para ordenar un ataque militar sin autorización del Congreso de su país ni de las Naciones Unidas. Los hechos recientes manifiestan que el líder del país norteamericano puede actuar en conjunto con otras potencias sin autorización de sus propios legisladores para comenzar una guerra.

Trump está orgulloso de su segundo ataque militar contra Siria. El mandatario dijo el sá- bado que la acción militar que coordinó con Francia y Reino Unido no podría haber tenido mejor resultado. “Un bombardeo perfectamente ejecutado anoche”, escribió en Twitter. “Gracias a Francia y al Reino Unido por su sensatez y el poder de sus excelentes fuerzas armadas. No podría haber tenido un resultado mejor. ¡Misión cumplida!”.

Las fuerzas militares de los tres países bombardearon con más de 100 misiles dirigidos contra un centro de investigación científica cerca de Damasco, dos almacenes con armas químicas en la provincia de Homs y un centro de mando ubicado también en esa provincia siria, según informes del Pentágono. Esta acción militar fue la respuesta de Occidente al supuesto ataque químico en Dumas, ciudad cercana a la capital de Siria, que provocó la muerte de más de 40 personas y la intoxicación de 500.

Aunque el bombardeo ordenado por las tres naciones no provocó muertos ni heridos, de acuerdo a informes del Pentágono, demuestra que Trump puede saltarse al Congreso de Estados Unidos y al Consejo de Seguridad de la ONU para responder en contra de cualquier país.

“Al bombardear ilegalmente Siria, el presidente Trump ha negado una vez más al pueblo estadounidense cualquier supervisión o rendición de cuentas en esta guerra interminable”, dijo por Twitter la congresista demócrata Barbara Lee. La legisladora enfatizó que es el Congreso, no el Presidente, quien tiene el poder de autorizar cualquier acción militar.

En un comunicado, la congresista agregó que la decisión de atacar el régimen sirio sin autorización del Congreso muestra un desprecio por la Constitución de Estados Unidos y carece de justificación legal.

“El uso de armas químicas por parte del gobierno sirio contra civiles inocentes es atroz. Apoyo totalmente todos los mecanismos internacionales de rendición de cuentas para procesar estos crímenes de guerra y negociar una solución política a la guerra en Siria. Pero como hemos visto en los últimos 16 años, no podemos bombardear nuestro camino hacia la paz”, aseguró la congresista.

Lee también afirmó que el Congreso no está exento de culpa. Aclaró que el poder legislativo una vez más no pudo debatir los costos y las consecuencias de la guerra. “Pido al presidente (Paul) Ryan que celebre un debate y vote sobre una autorización para el uso de la fuerza militar antes de cualquier acción adicional en Siria”, exigió la legisladora.

En el mismo sentido, 88 congresistas, tanto republicanos como demócratas, enviaron una carta a Trump el viernes pasado en la que insistieron que antes de atacar obtuviera la aprobación del Congreso.

“Comprometer a nuestros militares en Siria cuando no existe una amenaza directa a los Estados Unidos y sin una autorización previa del Congreso violaría la separación de poderes que está claramente delineada en la Constitución”, cita el texto.

Minutos después de la acción militar, el senador Tim Kaine dijo que la decisión de Trump de lanzar ataques aéreos contra Siria sin la aprobación del Congreso es ilegal. “Debemos dejar de dar a los presidentes un cheque en blanco para librar la guerra. Hoy es Siria, pero ¿qué va a impedirle bombardear Irán o Corea del Norte a continuación?”.

El senador señaló el riesgo de que el jefe de Estado de cualquier país comience a utilizar su armamento militar contra una nación sin ninguna autorización del poder legislativo. El ataque a Siria podría ser el comienzo de una serie de acciones militares de parte de Trump contra aquellos países que ya ha amenazado, tales como Corea del Norte.

Las Naciones Unidas, organismo creado para procurar la paz mundial, tampoco es una barrera cuando Trump decide atacar un país. La ONU convocó a una reunión del Consejo de Seguridad en la que se concluyó que se realizaría una investigación sobre el ataque quimico antes de indicar cualquier tipo de represalia contra el culpable.

No obstante, el presidente de Estados Unidos ordenó el ataque militar contra el régimen del presidente de Siria Bashar Al-Ásad antes de los resultados de las pesquisas.

Razones por las que el ejército de Estados Unidos permanece en Siria

>Asegurarse de que no se usen armas químicas

>Derrotar al Estado Islámico

>Controlar la influencia iraní en la región

Occidente con Trump

A pesar de que es uno de los presidentes estadounidenses más impopulares de la historia reciente, Trump tiene el apoyo de las potencias de Occidente. El ataque militar contra siria fue un gran ejemplo. El gobierno de Reino Unido anunció su participación en el ataque coordinado por Trup a través de su primera ministra Theresa May.

“He hecho esto porque juzgo que esta acción es de interés nacional para Reino Unido. No nos podemos permitir que se normalice el uso de armas químicas, sea en Siria, en las calles de Reino Unido o en cualquier otro sitio de este mundo. Hubiéramos preferido seguir otro camino, pero esta vez no había otro”, argumentó la líder británica.

El presidente de Francia Emmanuel Macron mencionó tras el ataque que ni París ni sus aliados pueden “tolerar la banalización del uso de armas químicas”. Macron explicó que el objetivo es limitar la capacidad de “producción y uso” de ese armamento por parte de Siria.

Aunque el gobierno de Alemania no participó en la intervención militar, la canciller Angela Merkel afirmó que el ataque fue necesario y proporcionado. “Apoyamos la iniciativa de nuestros aliados americanos, británicos y franceses…Alemania apoyará todos los pasos diplomáticos que se den en esta dirección”, comentó este sábado la canciller.

Canadá también mostró que está de acuerdo con las acciones de Trump. Su primer ministro Justin Trudeau señaló en un comunicado que su país “apoya la decisión de tomar medidas para degradar las habilidades del régimen de El Asad de lanzar ataques con armas químicas contra su propia gente”.

La Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) también estuvo a favor del ataque. En un comunicado, su secretario general Jens Stoltenberg afirmó: “Apoyo las acciones emprendidas por Estados Unidos, Reino Unido y Francia contra las instalaciones y capacidades de armas químicas del régimen sirio. Esto reducirá la capacidad del régimen para atacar aún más al pueblo de Siria con armas químicas”.

Por otra parte, la embajadora de Estados Unidos ante Naciones Unidas Nikki Haley aseguró ayer que el ejército estadounidense no abandonará Siria hasta que cumpla sus objetivos. Haley indicó que los tres objetivos básicos para Estados Unidos en Siria son asegurarse que las armas químicas no se usen de ninguna manera que ponga en riesgo los intereses estadounidenses, que el Estado Islámico sea derrotado y controlar la influencia iraní en la región.