Los civiles en Gaza ya no pueden contar ni con Naciones Unidas para su protección.
Al menos 15 personas murieron y decenas resultaron heridas ayer cuando un tanque israelí disparó contra una escuela de la ONU que daba refugio a civiles palestinos, informaron autoridades de salud de Palestina mientras Israel sigue adelante con su ofensiva militar contra los milicianos de Hamás.
Kamel Al Kafarne, quien estaba en la escuela, dijo que rescatistas de la organización internacional estaban subiendo a las personas en autobuses cuando tres proyectiles lanzados por tanques cayeron en el sitio.
En entrevista con Al Jazeera, el vocero de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina (UNRWA) Chris Gunness, dijo que su organización había estado en contacto con las fuerzas israelíes mientras se acercaban al albergue.
“Les dimos las coordenadas precisas de GPS del albergue. Estábamos tratando de coordinar una evacuación, pero nunca nos dejaron”.
Gunness calificó al ataque como “trágico y abominable”.
Culpan a Hamás
El ejército israelí dijo que está analizando el incidente y adelantó que Hamás pudo ser responsable, aunque no ofreció pruebas.
No es la primera vez que Israel bombardea una escuela. En el pasado ha argumentado que estas son usadas como guaridas para palestinos armados.