Un ‘Big Brother’ transparente
La reputación de Barack Obama y de su administración tambalea desde principios de junio pasado, cuando The Guardian reveló un documento en el que la Corte de Vigilancia de Inteligencia Extranjera (FISA, por sus siglas en inglés) concedía un plazo de tres meses para que la Agencia de Seguridad Nacional (NSA, por sus siglas en inglés) monitoreara millones de registros telefónicos de los usuarios de Verizon.
A este escándalo se sumó el PRISM, que involucraba a compañías como Google, Apple, Microsoft, Facebook, Yahoo, entre otras.
Indigo StaffLa reputación de Barack Obama y de su administración tambalea desde principios de junio pasado, cuando The Guardian reveló un documento en el que la Corte de Vigilancia de Inteligencia Extranjera (FISA, por sus siglas en inglés) concedía un plazo de tres meses para que la Agencia de Seguridad Nacional (NSA, por sus siglas en inglés) monitoreara millones de registros telefónicos de los usuarios de Verizon.
A este escándalo se sumó el PRISM, que involucraba a compañías como Google, Apple, Microsoft, Facebook, Yahoo, entre otras.
Esta información, revelada por el exempleado de la CIA Edward Snowden al periodista Glenn Greenwald, motivó al gobierno de Estados Unidos a publicar un reporte anual sobre sus actividades de vigilancia.
Según informó James Clapper, director de Inteligencia de EU, su informe incluirá el total de órdenes emitidas durante el año correspondiente y especificaciones sobre estas, así como el número de afectados.
Clapper detalló en su blog oficial que la decisión de publicar los datos se debe también a una instrucción dada en junio por el presidente Obama, con el objetivo de “transparentar” los programas de vigilancia que pretenden “velar por la seguridad nacional”.
Un funcionario anónimo confirmó a The Washington Post que Snowden influyó directamente en esta decisión.Barack Obama ordenó que se publiquen detalles sobre las solicitudes de información de su gobierno.