Brasil no se da por vencido con el tema del espionaje que supuestamente sufrió por parte de Estados Unidos.
La presidenta Dilma Rousseff no quedó conforme con la respuesta de su homólogo Barack Obama, y además de cancelar la visita de Estado que tenía programada a EU para el próximo 23 de octubre, el domingo anunció vía Twitter que instalarán un nuevo sistema de correo electrónico para aumentar la seguridad en sus comunicaciones.
El ministro de las Comunicaciones, Paulo Bernardo Silva, informó ayer que Rousseff firmará un decreto que hará obligatorio el uso de este sistema en todas las instancias del gobierno.
El programa, que será desarrollado por el Servicio Federal de Procesamiento de Datos, se basará en la tecnología denominada Expresso V3, que permite identificar intentos de acceder ilegalmente a las informaciones.
La semana pasada Rouseff anunció que Brasil acogerá en el 2014 un encuentro internacional sobre gobernanza de Internet, organizado por la Corporación de Internet para la Asignación de Nombres y Números. (Con información de AP)