Una muerte sospechosa

El misterio de una muerte ha puesto de cabeza a la política de Argentina.

Las autoridades hallaron muerto al fiscal Alberto Nisman, quien apenas la semana pasada había denunciado a la presidenta Cristina Fernández de encubrir a Irán en el atentado de 1994 contra la sede de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA). 

La muerte de Nisman ocurrió la noche del domingo, un día antes de su comparecencia en el Congreso, donde expondría las pruebas contra la mandataria kirchnerista. 

La prensa rioplatense reportó que al fiscal lo encontraron muerto en la bañera, con una pistola, con un disparo en la sien y con las cerraduras de su departamento sin señales de forcejeo.

La fiscal que lleva su caso, Viviana Fein, aclaró anoche que el arma no era de él y que “no habría habido intervención de otra persona”, pero que investigarán si hubo “algún tipo de inducción”.

Días antes de fallecer, Nisman denunció que había recibido amenazas, por lo que se acompañaba de una escolta de 10 agentes de seguridad. 

Desde el 2004, meses después de que el expresidente Néstor Kirchner llegó al poder, fungía como el fiscal especializado en encontrar a los culpables del atentado contra la AMIA, en el que murieron 85 personas.

Sin embargo, Nisman terminó su buena relación con el gobierno kirchnerista cuando, en enero del 2013, Argentina e Irán firmaron un “Memorandum de Entendimiento”. 

El jurista se molestó porque el documento se firmó a sus espaldas, por lo que acusó a Cristina Fernández y al ministro de Relaciones Exteriores, Héctor Timerman, de fabricar la inocencia de los supuestos terroristas iraníes involucrados.

Ahora los argentinos se cuestionan si la muerte de Nisman fue suicidio o se trató de un asesinato por motivos políticos.

¿Suicidio?

Desde temprano, funcionarios del gabinete de la presidenta comenzaron a sugerir que la muerte habría sido un suicidio. “En criminalística, no estoy hablando de este caso en especial, pero cuando usted tiene un cuerpo, un arma y tiene un casquillo, todos los caminos conducen a un suicidio”, indicó Sergio Berni, secretario de Seguridad, según el diario Clarín.

Aunque la jefa de Estado no hizo declaraciones públicas, Berni se limitó a afirmar a la radio que Fernández estaba sorprendida.

“(La reacción de Cristina) fue la misma reacción que tuvimos todos, de una sorpresa muy fuerte y después de conmoción debido al impacto que tiene este hecho”, aseveró el secretario a la estación de radio Mitre. 

¿Muerte política?

Políticos de la oposición y ciudadanos criticaron lo sospechoso de la situación al asegurar que se trata de un asesinato con motivaciones políticas. 

“Esto le agrega al panorama algo que hasta ahora no había, que es violencia, porque me resulta muy difícil de creer que Nisman se mató, ¿el tipo antes de declarar se mata? vamos, chicos”, manifestó el periodista Jorge Lanata en el canal TN Argentina.

La diputada de oposición Elisa Carrió acusó que la muerte del fiscal es una “señal mafiosa” del gobierno de Cristina Fernández.

“Esto lo vengo diciendo hace años: la opción en la Argentina es República o mafia. Estas muertes demuestran un grado de desesperación muy grande porque o (a Nisman) lo mataron o lo indujeron a morir”, dijo Carrió, según La Nación. 

Patricia Bullrich, legisladora del partido de oposición PRO, coincidió en que el suicidio era poco creíble. 

“No creo en la hipótesis de un suicidio alrededor de tanto poder y tantas situaciones. Siento que acá hay mucho que ver y muchos intereses”, subrayó la diputada a la radio Continental. 

Antes de morir, Nisman le pidió a un colega resguardar en una caja fuerte las pruebas que tenía contra el Gobierno kirchnerista: alrededor de 330 discos con grabaciones entre autoridades de Irán y Argentina, además de otros documentos

Una muerte de película

Estas son las claves e inconsistencias de la muerte de Alberto Nisman.

>  El Ministerio de Seguridad informó que su muerte ‘fue antes de la cena’ de la noche del domingo.  

> Al ver que no salía del departamento, sus escoltas llamaron a su madre, quien fue quien descubrió su muerte.

> El cuerpo de Nisman yacía en la regadera junto a una pistola de calibre 22.

> La autopsia reveló que murió de un balazo en la sien.

> La fiscal de su muerte aseguró que la pistola no era de él, pero que ‘no habría habido intervención de otra persona’.

> La fiscal también dijo que investigarían si ‘hubo algún tipo de inducción’.  

> Tras denunciar a la presidenta, el propio Nisman afirmó a los medios que esa acusación le podía costar la vida.

Periodista argentino

Cronología de un atentado

1994. Ataque.
> El 18 de julio explota un coche bomba frente a la sede la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), en Buenos Aires, lo que deja un saldo de 85 personas muertas.

2004. Pesquisa.
> El entonces presidente Néstor Kirchner designa a Alberto Nisman como el fiscal especializado del ‘caso AMIA’.

2006. Acusación. 
> Nisman identifica a cinco iraníes y a un libanés como los culpables del ataque. El fiscal asegura que, bajo las órdenes del Gobierno de Irán, el grupo Hezbolá ejecutó el atentado. Los culpables no se han capturado, presuntamente por la obstrucción de Irán.

2013. Ruptura. 
> El gobierno de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner firma un ‘Memorandum de Entendimiento’ con Irán, que implica crear una ‘comisión de la verdad sobre el atentado. Nisman se molesta porque no sabía nada del acuerdo.

2015. Denuncia.
> El 14 de enero, el fiscal acusa formalmente a la presidenta de ‘fabricar la inocencia de Irán’ con respecto al atentado. La denuncia por los delitos de ‘encubrimiento agravado, incumplimiento de deber de funcionario público y estorbo del acto funcional’.   

2015. Muerte. 
> Días después de presentar la denuncia y en la víspera de su declaración ante el Congreso, las autoridades encuentran el cuerpo sin vida de Nisman en el baño de su departamento, junto a una pistola y con una herida en la sien.