Un niño por familia no era suficiente, y dos tampoco lo serán. Pero el Gobierno de Xi Jinping ha decretado que los ciudadanos que sean hijos únicos podrán tener más de un bebé con su pareja.
Y a pesar de que las proyecciones demográficas prevén que las familias seguramente aprovecharán la reforma, puede que sea muy tarde para salvar la economía del país.
El objetivo de esta iniciativa es mejorar la situación de China. Pero “esto no será suficiente para contrarrestar el hecho de que el ‘país más poblado del mundo, con 1.3 mil millones de habitantes, tendrá muy pocos, o menos de los necesarios”, afirma la revista Time en su edición del 21 de noviembre.
El hecho de que no se haya publicado la fecha en que entrará en vigor esta política –y que las próximas reformas sobre temas familiares no estén muy claras– es un problema porque puede ser muy tarde para combatir las aflicciones sociales y económicas de China, señala el artículo de portada.
Incluso, algunos ciudadanos adinerados han preferido que sus hijos nazcan en el extranjero para registrarlos con pasaportes de otros países, lo que significa un costo menor que pagar las consecuencias económicas de las imposiciones del Gobierno.
Es por esto que a pesar de la reforma aprobada la semana pasada, es muy probable que los chinos sigan manejando a discreción la cantidad de hijos que tienen.
Ni tan desarrollados
La política poblacional que se empezó a aplicar en 1979, durante el gobierno de Deng Xiaoping, se convirtió en un problema para China.
Su población, que fue limitada para procrear descendientes, estará dominada dentro de unos años por personas de la tercera edad, que además de costarle al Gobierno, no producen.
Este tipo de problemas suelen estar presentes en países en vías de desarrollo como Jordania, Mongolia, Nicaragua y Vietnam, informó la ONU en el reporte “The global age watch”, que fue publicado el primero de octubre pasado.
“Para el año 2050, por primera vez en la historia, las personas mayores de 60 años van a superar en número a los jóvenes menores de 15”, precisa el informe.
Y a pesar de que la población de China es la más grande del mundo, la economía de este país se verá afectada, tanto o más que la de los países menos desarrollados debido a la escasez de mano de obra.