Mientras miles de personas hacen hasta lo imposible por ingresar a los Estados Unidos, algunos hispanos de la zona de San Diego, al sur de California, han tenido que mudarse a territorio mexicano, pues el costo de la vivienda en aquel lugar los ha superado.
De acuerdo con un reporte de la agencia de noticias EFE, el desequilibrio entre el costo de la vivienda y los ingresos en San Diego han hecho que algunas familias hispanas muevan su residencia a México, aunque eso implique cruzar la frontera diariamente.
Es decir, son hispanos que tiene su casa en territorio mexicano, pero trabajan y desempeñan su vida social en los Estados Unidos, por obvias razones, se trata de personas con la documentación necesaria para atravesar la frontera, sin problema alguno, las veces que lo necesiten.
Desde hace algunos años, distintas organizaciones comunitarias han registrado un aumento de casos de aquellos que fijan su residencia en México para ahorrarse, en algunas ocasiones, hasta la mitad del precio de la renta.
La mujer narró que anualmente los caseros aumentaban el precio de la renta en 150 dólares, hasta que la cantidad llegó a los mil 400 dólares mensuales, por lo tuvo que mudarse a Tijuana, donde paga 700 dólares por una vivienda para su familia.
Robles rentaba en el condado de Chula Vista, una de la regiones con menor costo de rentas en comparación con el resto de San Diego, según en el Centro de Iniciativas Políticas (CIP), es decir, no tuvo la capacidad para pagar una de las rentas más bajas del lugar.
“No hay realmente muchos lugares a dónde irse, salvo el sur de las frontera para quienes no pueden alquilar aquí”, declaró a EFE Peter Brownell, director de investigación del CIP.
Aunque estas personas podrían probar suerte en otra región de los Estados Unidos, eso implicaría comenzar de ceros, por ejemplo, para conseguir trabajo o escuela.
Se calcula que en el cruce entre Tijuana y San Ysidro se registra un flujo diario de 50 mil vehículos y 25 personas, según información de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza.