¡AMLO tenía razón!
Semanas y hasta meses de un debate estéril en relación a la programación de este juego México–Brasil en Sao Paulo, que coincidió con el día de votaciones intermedias en nuestro país.
Gustavo Madero, líder del PAN; Andrés Manuel Lopez Obrador, mandamás, fundador y dueño de Morena; y hasta el jefazo del INE, Lorenzo “El Llanero Solitario” Córdova, se montaron en el mediático tema del fut jalando reflectores.
Alfredo Domínguez MuroSemanas y hasta meses de un debate estéril en relación a la programación de este juego México–Brasil en Sao Paulo, que coincidió con el día de votaciones intermedias en nuestro país.
Gustavo Madero, líder del PAN; Andrés Manuel Lopez Obrador, mandamás, fundador y dueño de Morena; y hasta el jefazo del INE, Lorenzo “El Llanero Solitario” Córdova, se montaron en el mediático tema del fut jalando reflectores.
El más acertado fue Andrés Manuel, quién hasta exigía cancelación del juego organizado a propósito, según su decir, por las “Mafias del Poder” para distraernos y que se nos pasara el ir a votar.
El tiempo nos demostró que López Obrador fue el más atinado de los tres políticos populacheramente oportunistas, este juego…
Debieron cancelarlo…
Y no por las razones sin sustento y hasta excusas por adelantado para que los partidos políticos tengan un buen culpable del predecible abstencionismo de este domingo de AMLO, sino porque este grupo parece no ir para ningún lado.
El Scratch de Dunga nos exhibe en solo un par de jugadas, ambas errores flagrantes de dos de nuestros pilares, nuestro porterazo (a veces falla, ayer lo hizo) José de Jesús Corona, se come la finta de Coutinho, el del Liverpool, que lo hace ver hasta ridículo tirándose hacía el área chica cuando cuidaba su primer poste, y es por ese hueco que Chuy le deja, por donde entra el primero gol del equipo brasileño.
Luego entre William y Coutinho nos traen locos y el que cae es nuestro eterno capitán Rafael Márquez, al que le quiebran la cintura y hasta las ideas, dejándolos pasar como por su casa para después fusilar a Corona.
¡Y eso fue todo!
Ahí podríamos haber recogido la mesa de la botana, ya no hubo nada en la segunda parte, ni para los nuestros ni para el Scratch.
Este equipo que conduce el exfigurón Dunga, no parece tener mucha pólvora para la Copa América aunque, seamos sinceros, nuestro TRI no fue rival de altura y mucho menos sinodal de calidad. El Scratch tuvo muy pocas ocasiones de gol, los nuestros…
Ni una sola
Salvo aquella falta sobre George Corral que el árbitro no marca, tampoco nos expulsa al sobre revolucionado exXolo y hoy ya americanista confeso, Javier Güemez, quien mete tremendo planchón a Danilo que sale con un golpazo en el tobillo, la nueva adquisición del Real Madrid, que pone con esa lesión a sufrir no solo a Dunga sino a Florentino Perez, el mandamás del Real.
Esta versión de nuestro TRI no asusta a nadie, no genera sensación de peligro y las opciones de gol son escasas y muy predecibles.
Nuestros delanteros no le anotan ni al arcoíris, “Lalo” Herrera, el de PUMAS, voluntarioso y ya, Raúl Jiménez busca meterse metiéndole el alma pero eso no basta en la cancha, falla los escasos pases y las más pocas opciones de gol.
Matías Vuoso si no fuera por sus tatuajes ni siquiera se vería, un poco más atrás de el, Fabián es de nuevo “Marquito”, y nuestra zaga se sostiene ahí pero no pueden solos, los errores de Corona y “Rafa” son circunstanciales, pero esta vez inciden directamente en el marcador.
El “Tecatito” Corona es, sin duda, el jugador importante de este grupo, se lo ha ganado a pulso.
El más grande Djokovic
Para los que buscan alguna debilidad en el juego del indiscutible número UNO del planeta, el serbio Novak Djokovic, no le sigan, no lo van a encontrar, no hay excusa ni pretexto que pueda esgrimirse ante el triunfo indiscutible del suizo Stanislaw Wawrinka en la finalísima del Roland Garros.
Fue un partidazo, de lo mejor que hemos visto en muchos años, dominio alterno, jugadas largas, tremendos tiros ganadores, muchas fallas en la red, estrategias de arranque que debieron modificar a lo largo de los cuatro sets tremendamente disputados.
“Nole” Djokovic comienza dominador con su juego de fondo, “Stan” se mete en su juego contestando con potencia, el serbio se colocaba retador incluso 4 ó 5 metros por detrás de la línea de fondo y desde ahí consigue ese primer set.
Wawrinka tiene en su revés su arma principal, sobre todo cuando en lugar de cruzarlo lo ejecuta con fuerza de forma paralela a la línea, ahí recorta distancias con el líder de la clasificación de la ATP.
La fuerza mental de ambos es impresionante, “Stan” se levanta de un 0-3 en el cuarto set para primero igualar y después meterse en una batalla épica, olvidando estrategias para improvisar variantes, de pronto cambio de boleas en tiros cortitos, intercambio de puntos de a 20 golpes, la condición física es también factor par ambos lados.
Al final Stanislaw Wawrinka, no es casualidad su número 4 del planeta, da el juego de su vida superando al mejor de todos, al número uno Novak Djokovic en su mejor versión, ¡no le busquen! no pierde Djokovic… gana Stan Wawrinka..
Así de fácil…