El gobernador Jaime Rodríguez –en apenas un año y dos meses que tiene en el cargo- alcanzó ayer su momento de mayor desgaste en su administración.
Cientos de personas tomaron el Palacio de Gobierno y literalmente se colaron hasta su despacho para protestar contra el alza de impuestos que impulsó el mandatario estatal la confabulación con los diputados locales.
“¡Fuera el Bronco, fuera el Bronco!”, gritaban los cientos de manifestantes que irrumpieron en Palacio de Gobierno.
Hace unos meses en redes sociales comenzaron los primeros reclamos y comentarios de decepción en contra de Rodríguez principalmente por el fracaso de su promesa de encarcelar al exmandatario Rodrigo Medina.
El equipo de asesores de “El Bronco” simplemente los minimizó. Pero luego siguieron los abucheos hace dos semanas e la Arena Monterrey durante una pelea de box.
Lo de ayer es notable: desde hace tiempo no se había presentado en Palacio de Gobierno una protesta de repudio tan intensa contra un gobernador que hizo que hasta el secretario general de Gobierno, Manuel González, tuviera que salir huyendo por la puerta trasera.
La burbuja en la que vive el gobernador, conformada por sus lacayos, finalmente ayer se reventó y “El Bronco” tuvo un duro golpe de realidad.
¿Qué hace Lorenia Canavati?
El gobierno que se proclama ciudadano, el gobierno que presume a nivel nacional la ley de participación ciudadana más moderna, no tuvo interés ni tiempo para escuchar las voces de los ciudadanos que ayer se plantaron en Palacio de Gobierno.
Ningún representante de la administración de Jaime Rodríguez, quien se encontraba en ese momento en la Ciudad de México, salió para atender las peticiones de los manifestantes inconformes por el alza de impuestos decretada por “El Bronco” para el próximo año.
Ante tal desaire uno se pregunta qué hace Lorenia Canavati, además de cobrar su sueldo de 80 mil pesos mensuales en la oficina de Fernando Elizondo.
Ella, se supone, es la coordinadora de enlace con la sociedad civil, o por lo menos es el cargo que presume, entonces le correspondía atender a los grupos de ciudadanos que tomaron el Palacio de Gobierno.
¿Será que con esa indiferencia a los reclamos de la ciudadanía quiere ser alcaldesa de San Pedro, la señora Canavati?
Una canallada contra los abuelitos
Una pregunta para Natalia Berrún, todavía secretaria de Desarrollo Social del Estado: ¿A quién se le ocurrió citar en el día más frío del año en una bodega descubierta a las personas de la tercera edad para entregarles su apoyo económico?
Alegando que las tarjetas ya no funcionan, la Secretaría de Desarrollo Social convocó ayer en la Expo Guadalupe a los abuelitos del padrón de beneficiarios de los programas sociales.
En la mañana de ayer hubo incluso algunas personas que tuvieron que ser atendidas polos servicios médicos. La entrega seguirá el día de hoy y mañana.
Tan sencillo era revisar el pronóstico del tiempo.
No es casualidad que en los próximos días Berrún estaría corriendo la misma suerte que su compañera en la UANL, Esthela Gutiérrez, exsecretaria de Educación del Estado.
