23.7 millones de turistas internacionales llegaron a México. Los ingresos de divisas fueron de 13.8 mil millones de dólares, registrando un aumento de 8.5 por ciento con respecto a 2012.
El Caribe Mexicano contribuyó a este aumento. La afluencia de turistas alcanzó los 9.4 millones de visitantes durante el año pasado. Un poco mas de cuatro millones visitaron la Riviera Maya y otros cuatro Cancún, siendo este último el destino con mayor incremento, 12.4 por ciento.
De los estadounidenses, que representan el 55 por ciento del total de los turistas que llegan a México, 40 por ciento de ellos llegaron por el aeropuerto de Cancún.
Todas estas cifras nos indican que el Caribe Mexicano es la región más importante de captación de divisas por turismo y Cancún es su centro.
Pero todo este bello panorama de números no se refleja en la Ciudad de Cancún y su zona hotelera. Su casi nula infraestructura. La falta de puentes, calles y circuitos que den fluidez a los carros de una ciudad que casi alcanza el millón de habitantes.
El centro cada día mas viejo, mas deteriorado. Y los grandes elefantes blancos. Aquellas obras que llevan años vacías o abandonadas, que se caen a pedazos por el salitre y el sol, y que nadie hace nada para, o bien taparlos, arreglarlos o en definitiva tumbarlos y volverlas áreas verdes.
Cada año el tráfico es más intolerable y no hay obras que se estén construyendo para darle fluidez a los más de 70 mil vehículos que transitan diariamente por los 24 kms. de franja de zona hotelera.
Una de las zonas con mayor problemática es el área de Punta Cancún, donde se concentran las discos, bares y centros nocturnos, que por cierto hoy pertenecen a un solo grupo, el Grupo Mándala que ha comprado desde el Dady’O hasta el Sr. Frogs.
Esta zona pide a gritos volverse peatonal para bien de los miles de jóvenes que se concentran cada noche. Y buscar redirigir el tráfico vía un puente.
No hay una correspondencia entre las cifras y las vistas.
Dicen que las cosas cuando no suceden es, o porque no hay voluntad, o porque no hay capacidad. Cualquiera que sea las opciones el dinero que representa este destino debería de ser de interés federal. Hoy solo parecen cifras vacías.