¿Congelar o no congelar?
En el Congreso apenas les llegó la iniciativa del presidente Enrique Peña Nieto sobre el matrimonio igualitario... y ya se les está haciendo bolas el engrudo. Los únicos que saludaron sin ambages la iniciativa fueron los coordinadores del PRD, quienes aplaudieron que el país avance hacia el reconocimiento del derechos. En el PRI, los coordinadores en el Senado y en la Cámara de Diputados le dieron la vuelta al asunto y dijeron que no darán una opinión hasta analizar la propuesta del Ejecutivo.
Redes de PoderEn el Congreso apenas les llegó la iniciativa del presidente Enrique Peña Nieto sobre el matrimonio igualitario… y ya se les está haciendo bolas el engrudo. Los únicos que saludaron sin ambages la iniciativa fueron los coordinadores del PRD, quienes aplaudieron que el país avance hacia el reconocimiento del derechos. En el PRI, los coordinadores en el Senado y en la Cámara de Diputados le dieron la vuelta al asunto y dijeron que no darán una opinión hasta analizar la propuesta del Ejecutivo. Pero donde seguramente habrá espectáculo será en el PAN, pues, como es bien sabido, en el partido de derecha hay un ala progresista y una ultraconservadora, lo que promete un encuentro nuclear de ambas posturas. Lo cierto es que los legisladores ya adelantaron que no tienen prisa en discutir el tema, así que hay el peligro de que sea enviada derechito a la congeladora. Lo que deberán tomar en cuenta es lo bien que fue arropada esta iniciativa por la mayoría de las organizaciones ciudadanas.
El día
Hoy se cumple el plazo para que los maestros disidentes vuelvan a clases o serán dados de baja, según anunció la Secretaría de Educación Pública.
La verdad es que la protesta no ha tenido los efectos de otros tiempos y es altamente probable que los maestros rijosos mejor le entren a la chamba o se quedarán si su plaza. Por eso es un día importante, porque hoy es el día que sentará un precedente en materia de educación. Todo parece indicar que los chantajes ya no están en el plan de estudios.
PAN, de luto
El Partido Acción Nacional pierde no sólo a un militante de cepa con la muerte de Luis H. Álvarez. En realidad pierde al último de los de la generación que lucharon desde la adversidad y oposición. Don Luis, como le decían, conoció la llegada al poder del panismo tras décadas de lucha y sacrificios. En pocas palabras, actualmente, ni los expresidentes emanados del PAN están hechos de la materia de la que estuvo hecho Luis H. Álvarez. Descanse en paz.