El día más esperado

Seguramente hoy es el día más esperado para Florence Cassez, para el gobierno de Francia, y para millones de mexicanos.

>Y es que de las resoluciones que adopte la Suprema Corte de Justicia dependerá no la libertad para Florence Cassez y el futuro de las relaciones de México y Francia, sino también el tímido renacimiento de la confianza en los órganos de administración de justicia de México.

¿Cómo se puede condenar a una persona en base a testimonios falsos?

¿Cómo se puede garantizar la justicia, si se admiten las simulaciones como las que Genaro García Luna realizó para inculpar falsamente a miles de mexicanos?

Crimen y castigo

Los hechos están ahí. Son irrefutables.

Hay crímenes cometidos desde el poder, pero todavía no vemos que alguien haya movido un dedo para castigar a los responsables. 

Es evidente que en el sexenio de Felipe Calderón, y aún en el de Vicente Fox, se fabricaron culpables a diestra y siniestra al contentillo de las autoridades. 

Lo mismo fueron a dar a la cárcel generales inocentes, que ciudadanos comunes y corrientes, acusados injustamente por falsos testigos. 

Ahí está la evidencia del Michoacanazo.

También la simulación de la detención infraganti de Florence Cassez y los falsos testimonios inducidos en su contra. 

Ahí están los encarcelamientos de generales inocentes como Tomás Ángeles Dauahare. 

Ahí están pues, los crímenes cometidos desde el poder. 

Lo que está por verse es si habrá castigo para los culpables de estos crímenes.

Una buena noticia

La buena noticia es queEmilio Gamboa, líder de la bancada tricolor en el Senado, anunció que los priistas revisarán la utilidad de la figura del arraigo y de los testigos protegidos, a propuesta del procurador Jesús Murillo Karam.

¿Para qué estudiar tanto el asunto cuando sobran las recomendaciones internacionales para que las dos figuras jurídicas desparezcan cuanto antes de las leyes mexicanas? 

Figuras como esas eran las que se acostumbraban en tiempos de la inquisición.

Reprueban a Calderón en la Ibero

Mientras que en Harvard quieren a Calderón para que sirva de “tírenle al negro” para sus estudiantes, el expresidente yafue reprobado por 15  directores de la Universidad Iberoamericana. 

Felipe Calderón no pasó en ninguna materia y ya no tiene derecho a presentar examen extraordinario. 

Ahora nada más falta que mande a Cocoa su hermana a acusar que esto también es un compló del gobierno de Peña Nieto que se alió con los jesuitas. 

¿Para qué queremos al IFE? 

Para todo podrá servir el IFEmenos para garantizar que los procesos electorales sean libres y democráticos.

Y es que lo que los consejeros electorales discutirán el día de hoy, serán solamente las superficialidades presentadas en el informe de la Unidad de Fiscalización, a cargo de Alfredo Cristalinas.

Y aunque ciertamente el Instituto Federal Electoral para algo sirvió cuando lo presidía José Woldenberg, está claro que desde entonces el árbitro electoral, incluido el tribunal, ni es justo, ni es imparcial.

Ahora resulta que los tricolores son unas blancas palomas por la triangulación de las tarjetas de Monex y que los tramposos fueron los partidos que apoyaron a Andrés Manuel López Obrador. 

¿Si al final de cuentas, los consejeros sólo van a convalidar trampas y marrullerías, para qué gastamos miles de millones de pesos en algo que se transformó en otro monstruo burocrático gubernamental que no tiene ninguna utilidad, ni nada de ciudadano?

Y conste que esto no es mandar al diablo a las instituciones. En los Estados Unidos como en muchos países democráticos, no tienen IFE.