El gol y el fraude

El mundo del futbol festeja los 30 años del GOL del siglo de Diego Armando Maradona, paradójicamente, en ese mismo partido en que Argentina elimina a Inglaterra en el Mundial de México 86, el propio Diego anota el FRAUDE del siglo, con la trampa llamada por los argentinos la “Mano de Dios”.

El gol de golres

Alfredo Domínguez Muro Alfredo Domínguez Muro Publicado el
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En el juego donde Argentina elimina a Inglaterra, Diego anota el FRAUDE del siglo

El mundo del futbol festeja los 30 años del GOL del siglo de Diego Armando Maradona, paradójicamente, en ese mismo partido en que Argentina elimina a Inglaterra en el Mundial de México 86, el propio Diego anota el FRAUDE del siglo, con la trampa llamada por los argentinos la “Mano de Dios”.

El gol de golres

Con el marcador 1-0 a favor de Argentina, minuto 54 de tiempo corrido, Diego recibe un balón de cara a su propio marco y antes de rebasar la media cancha, con una finta pasa entre tres ingleses y comienza su carrera con esas piernas cortas que se pegaban al balón como si fueran uno.

Aprieta la velocidad, le salen otros dos, también se los quita, entra al área, le tratan de faulear, es inútil, le sale el arquero inglés Peter SHILTON, también lo saca con una finta empujando el balón justo cuando por detrás lo faulean.

Un poema de gol rubricado por el más grande de su época y uno de los cinco, o tres o dos mejores de toda la historia, era el MARADONA más completo en su mejor momento.

El fraude del siglo

Paradójicamente en ese mismo partido, en una jugada en la que viene un centro de Burruchaga por derecha, muy fácil de atajar y controlar por el “Viejo Lobo” Shilton, tomando en cuenta que el centro era débil y muy abierto dentro del área grande, DIEGO se atreve, ese es su mérito siendo tan chaparrito, a retar al porterote inglés que a pesar de estirar los brazos, es superado por Maradona para anotar el gol que en ese momento marcaba la diferencia, iba 0-0.

El culto a la trampa

En ARGENTINA se dan por ofendidos y alguien saca por ahí aquello de “LA MANO DE DIOS, LA MANO DE MARADONA”, y así el propio Diego se agranda cobijado en ese culto que va más allá del GRAN futbolista, hasta llegar al culto grosero a su persona que el acepta gustoso.

Es el ”CULTO A LA TRAMPA”, el mismo que trata de protegerlo de sus cada vez más evidentes adicciones que se descubren en Italia con la indignación de la Argentina entera que clama conspiración, y hacen crisis en aquel doping positivo en  Estados Unidos 94 en donde, una vez más ARGENTINA toda, se rasga las vestiduras tratando de proteger a su tramposo héroe, es el Maradona ser humano que está muy lejos de alcanzar al Maradona futbolista… Así de fácil.

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