Escupir al cielo

BRASIL y URUGUAY, dos de los grandes históricos de Sudamérica, se van de la COPA AMÉRICA CENTENARIO igual que llegaron a ella, solo cumpliendo el compromiso de presentarse, cobrar y a otra cosa.

Su falta de pasión, compromiso, entrega y amor por “SUS” colores, contrastan radicalmente con los 24 equipos que lo dejan todo en las canchas de la EURO FRANCIA 2016.

La diferencia de futboles más allá de figuras o plantillas es abismal, aquí en EUROPA la competencia interna es feroz, el formar parte de “SU” selección es un honor que lo supera todo (¡SALUDOS CARLITITOS VELA!), en varias selecciones de SUDAMÉRICA es un requisito más, para muchos casi un fastidio.

Aquí está el mejor futbol del mundo por clase y calidad, pero también por pasión y entrega, elementos que si se tuvieran en esta Copa América otro gallo cantaría.

Culto a la mediocridad

Esta desidia que se refleja en los muy pobres argumentos para defender sus vergonzosas derrotas son como escupir al cielo para que les caiga de regreso.

El daño a esta y otras Copas América está hecho desde mucho antes, quizá desde aquella ocasión en que ARGENTINA decidió de forma COBARDE y VERGONZOSA no asistir a la Copa del 2001 en Colombia, argumentando “sospechas de inseguridad”, o cuando el técnico en turno de ECUADOR, el famoso “BOLILLO” GÓMEZ justificó su eliminación porque:

“Preferimos guardarnos para las Eliminatorias”, exactamente como ahora lo hace el técnico de Colombia JOSÉ PEKERMAN, para justificar esa derrota ante Costa Rica producto de ¡10 cambios! en su alineación, con el endeble argumento de que “aprovecho para ver a algunos jugadores para futuras competencias”, como si esta no fuera una muy importante.

No es la primera vez que uno o más de los “GRANDES” de Sudamérica bota la Copa América con una insultante falta de compromiso, profesionalismo y hasta insulto, primero a su propia afición que los sostiene, luego a sus SOCIOS en Conmebol y luego al mundo entero, que los deja de sintonizar abaratando su producto.

Brasil juega basura

La arrastrada que esta generación futbolera de BRASIL le está dando a la leyenda y prestigio históricos del SCRATCH es ya intolerable.

Los reclamos justificados en la derrota ante PERÚ, que les gana con un gol que el delantero Ruidíaz empuja con la mano, es solo una cortina de humo que tapa la realidad.

Brasil no tuvo argumentos para anotar un gol en los otros 89 minutos de partido y lo que es peor, “no se acuerdan” del gol que el árbitro le anula a Ecuador en ese 0-0 de la primera jornada de esta Copa América Centenario.

Uruguay se enreda en su amagura

La “CELESTE”, que llega a esta Copa refleja fastidio, cansancio, abulia y apatía. Arrastraron su prestigio, se acabaron toda la energía en el juego ante nuestro TRI, cuando dominando a placer no concretaron y los nuestros les meten TRES en las contadas llegadas que alcanzaron a la meta uruguaya.

Ahí comenzaron las excusas hasta de sus directivos, el presidente de la Asociación Uruguaya declara estúpidamente y sin pruebas que el “Torneo está diseñado para México…”, luego intenta retractarse de tamaña barbaridad seguramente al reclamo de la Conmebol, luego son arrastrados por una débil Venezuela que los echa del torneo y a casa por la puerta de atrás.

¡Oportunidad de CONCACAF!  

Esta irregularidad sudamericana debe ser aprovechada al máximo por los líderes de Concacaf, nuestro MÉXICO y los “GRINGOS USA”, que hemos tomado el torneo con la seriedad, compromiso, pasión, sana competencia interna como se deben tomar todos estos torneos-vitrina.

Aquí no debe existir ese argumento simplista de que “El Mundial lo es todo”, aquí hay que ganar las medallas y el prestigio en disputa.

Así las cosas pues, los sudamericanos no aprenden, hay que bajarse del ladrillo de la soberbia que les hace creer que esto se gana solo con la camiseta, que el prestigio de BRASIL-URUGUAY-ARGENTINA se codea con los grandes de Europa con los que “merecen” enfrentar, haciendo menos a su propio torneo continental, es sin duda como ESCUPIR AL CIELO.. Así de fácil.