¡Esto es una gringada!

¡Gracias Superman y Rambo!

Como en las mejores películas gringas , sorry, norteamericanas, desde las de Rocky Balboa, o las legendarias de vaqueros de John Wayne, o las de Terminator, o como el Rescate al Soldado Ryan, ni hablar la de Todos fuimos héroes  o hasta Rambo, son los gringos, sí, los “muchachos buenos” de todas las películas de esos héroes tan “necesarios” para la humanidad, son ellos, nuestros antes odiados y hoy amados vecinos, los que tienen que venir a un rescate tan grande... 

Como Bill Clinton a Zedillo

Alfredo Domínguez Muro Alfredo Domínguez Muro Publicado el
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¡Gracias Superman y Rambo!

Como en las mejores películas gringas , sorry, norteamericanas, desde las de Rocky Balboa, o las legendarias de vaqueros de John Wayne, o las de Terminator, o como el Rescate al Soldado Ryan, ni hablar la de Todos fuimos héroes  o hasta Rambo, son los gringos, sí, los “muchachos buenos” de todas las películas de esos héroes tan “necesarios” para la humanidad, son ellos, nuestros antes odiados y hoy amados vecinos, los que tienen que venir a un rescate tan grande… 

Como Bill Clinton a Zedillo

Sí, como aquel rescate de 50 mil millones de dólares con el que el valiente Bill Clinton se enfrentó al Congreso Norteaméricano  para salvar, no solo al Gobierno de Ernesto Zedillo, sino a todos nosotros, el pueblo mexicano,  después del “Error de Diciembre” . Solo que hoy los norteamericanos a los que a partir de hoy les llamaré con muuuuuucho cariño y agradecimiento “MIS HERMANOUS GRINGOUS” que vienen a sacar la cara por nosotros en el tema más sensible, el que más nos afecta.

Los gringos, los héroes de todas las películas en la que triunfa el bien sobre el mal, tienen que venir al rescate del futbol mexicano, ese nuestro último bastión hasta hace unos meses imbatible e impenetrable por ellos, el “fut” era el único terreno en el que nos sentíamos superiores a ellos y hasta les dábamos clases. Hoy no solo nos superaron, sino que hasta nos han rescatado de la catástrofe segura.

Superman y Rambo al rescate

 Y como en las más sublimes y espectaculares escenas de Superman, el superhéroe americano vuela desde los cielos al observar cómo el autobús color rosa con nuestro Tri y todo el fut mexicano, directivos por delante, caía sin remedio y en ese vuelo majestuoso en tres planos captado con la maravilla de la cámara PHANTOM, nos alcanza metros antes de las rocas, rescatándonos de la caída en picada en ese precipicio sin fondo al que el malévolo Costa Rica sin piedad, con rudeza innecesaria que seguramente fue el detonador para desatar la furia de “MIS AMIGOUS GRINGOUS” y sin necesidad de ensañarse con nuestro ya bocabajeado TRI, nos había empujado a una trágica muerte sin remedio.

Y mientras Superman nos rescata llevando el autobús rosa en vilo, sin que hubiera heridos en nuestro Tri y directivos, con su vuelo supersónico y su fuerza sin par, allá en Panamá es Rambo el que apoyando la “Misión Rescate del Buen Vecino” , misión harto confidencial en la que no dejaron participar ni a los exAFI por temor a que se filtrara el secreto, Rambo se ha metido sigilosamente al mando de un puñado de héroes gringos, tres güeritos y tres negritos con otros tres,  “mexicans-hispanos” en la selva panameña, emergiendo de pronto de una lancha tipo tiburón blanco que cruza el Canal de Panamá. 

Los derriba a todos y llega al Estadio Nacional a darse de bofetones con todos los futbolistas y fanaticada panameña, mientras que el “México – Americano” al que ya nunca llamaremos “chicano”…

El ‘Gober’ Moreno Valle y su rueda de la fortuna

 Es Michael Orozco, el que juega en Puebla y a quien seguro el “Gober” Moreno Valle le dedicará su Rueda de la Fortuna itinerante, recibe refuerzos que reparte con Aron Johnson   y Graham Zusi para meter tres golazos y así dejar tendidos a los azorados panameños.

Sí, son los héroes americanos, los héroes gringos los que sacan la cara por nuestro bocabajeado “fut”. 

Sí, gracias a nuestro “buen vecino”, el Tri de mi corazón aún vive en esta eliminatoria espantosa y humillante,  en los tiempos mas tristes pero irónicamente con las arcas más llenas que nunca de nuestro fut, que ahora viajará de oficio hasta Nueva Zelanda para arrebatar, ¡cómo de que no! el último boleto del Mundial de Brasil. 

¡Gracias una vez más amiguos gringuos!

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