Como si no fueran pocos los excesos con los que acostumbra comportarse, Rodrigo Ramírez Reyes, oficial mayor de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes —léase fajos de billetes, alcohol, fiesta— hace poco nombró como coordinador de asesores a un oscuro personaje de nombre Omar Blanco, quien se ha dado a la tarea de realizar una serie de despidos para poder acomodar a sus compinches y cómplices; además de estarse involucrando en áreas para las que no tiene preparación técnica y jurídica adecuada, es decir, el área de Recursos Humanos, Planeación y Adquisiciones. Al interior de la dependencia y, por lo que ven, hay muchos que aseguran que este par de individuos van a terminar enredados en serios problemas penales.
Ah, bueno
Durante las últimas semanas el crecimiento de casos de influenza ha sido acompañado por la constante denuncia de ciudadanos de que en el Sector Salud no estaban preparados para un incremento de esta naturaleza y que incluso ni siquiera tenían el medicamento para poder contrarrestar los efectos de esta enfermedad. Las críticas para José Narro no se hicieron esperar y finalmente dio la cara y dijo que sí hay medicamentos suficientes, pero en el sector privado. ¿Y el sector público, que es dónde él trabaja?
El de Enciclomedia
En el tema del Proyecto de Integración Tecnológica Aduanera (PITA) del SAT, actualmente en licitación, hay un participante que tiene un historial poco digno de presumirse: nos referimos a Ricardo Orrantia Cantú. La empresa se llama Integradores de Tecnología y ha sido inhabilitada en diversas ocasiones y sus asuntos han ido a parar a la Procuraduría General de la República con averiguación y previa y toda la cosa. Nada más hay que recordar que fue la proveedora más importante del proyecto foxista Enciclomedia. Ese que acabó siendo una pifia total y que será recordado como el proyecto emblemático de corrupción del primer sexenio panista.