¿Qué pasa cuando no tienes política de comunicación? ¿Cuando el tema más importante de tu gobierno, el de la seguridad, se ha deteriorado? ¿Cuando piezas claves de tu gabinete te están abandonando y tú sueñas con la presidencia? ¿Cuando te renuncia un elemento que representa estabilidad y confianza con la IP y con la Federación?
¿Qué pasa cuando se acabaron los argumentos, las tácticas dilatorias y las mentiras ya no tapan el sol? ¿Cuando no hay manera de culpar a alguien más?
Cuando llegas a esos niveles de degradación la mejor política es el silencio.
No hay manera de implementar un control de daños si el titular de la dependencia más importante de tu gobierno te renuncia y no tienes un relevo preparado para ocupar su cargo.
Es por eso que entendemos que el Gobierno de Jaime Rodríguez haya decidido ni confirmar ni desmentir ni hacer nada con respecto a la renuncia que el general Cuauhtémoc Antúnez presentó el lunes pasado.
La incapacidad de reaccionar ante las crisis son también los síntomas de un gobierno moribundo y desahuciado.
Las victorias de Manuel González
Un año y medio le bastó a Manuel González, secretario general de gobierno, deshacerse de sus tres principales enemigos que formaban parte del gabinete del gobernador Jaime Rodríguez.
Primero fue el entonces procurador Roberto Flores, amigo personal de Rodríguez, que tuvo que renunciar luego del golpeteo mediático que se impulsó desde la oficina del número 2 del Gobierno estatal.
Luego fue Fernando Elizondo, el aliado político con quien “El Bronco” garantizó el respaldo de la IP a su campaña y siempre mantuvo una rivalidad con González.
El último ha sido el general Cuauhtémoc Antúnez, quien el pasado lunes renunció a su cargo como secretario de Seguridad Pública de Nuevo León.
Flores, Elizondo y Antúnez eran los funcionarios con representaban un riesgo para Manuel González y su estrategia de ser el personaje con más influencia y poder sobre el gobernador Rodríguez.
Con Flores, Elizondo y con Antúnez, González tuvo sus confrontanciones. Algunas mediáticas y otras sólo internas.
Pero en todas “El Bronco” siempre prefirió respaldar a su amigo Manuel sobre el resto de los funcionarios.
Hoy Manuel González pretende extender su control a la Secretaría de Seguridad. Hoy planea designar al reemplazo de Juan Antonio Caballero en la Agencia Penitenciaria y hacerse del control del área administrativa junto con Carlos Guevara, el jefe de Seguridad Gubernamental y líder de “La Guber”.
Y una buena noticia para NL
No todo es caos y malas noticias en el Gobierno de Nuevo León.
Fitch Ratings informó ayer que mejoró la calificación de la calidad crediticia del estado de Nuevo León de “BBB+(mex)” a “A-(mex)”.
La modificación de la calificación, explicó Fitch en su comunicado, se debe al fortalecimiento financieroo registrado en el cierre del 2016 resultado de una mejor gestión administrativa y ahorro interno.
Esto aunado a la aplicación de la Ley de Disciplina Financiera fue clave para el mejoramiento de los indicadores a las finanzas estatales.
La noticia es un reconocimiento a las políticas de ahorro y control financiero que ha implementado el tesorero del Estado, Carlos Garza.
