Grupo Allende en Monterrey VI y el perito de la Torre Tanarah

El Grupo Allende será el que recibirá toda la atención en el proceso de adjudicación del contrato de Monterrey VI, la obra del sexenio del gobernador Rodrigo Medina.

La empresa Pyecsa, de Gustavo Cavazos, líder del Grupo Allende, es una de las constructoras que forman parte del consorcio que se perfila para llevarse este contrato de más de 16 mil millones de pesos.

Sin embargo, en el medio de los constructores de Nuevo León, se sabe que el personaje clave detrás del acueducto para traer agua del Río Pánuco se llama Rogelio García.

Él con su empresa Desarrollo Rogar, será el que coordinará el proyecto de infraestructura más ambicioso en la historia de Nuevo León.

¿Quién es Rogelio García?

Es uno de los hombres de confianza del empresario Juan Armando Hinojosa Cantú, el constructor que edificó varias de las principales obras públicas en el Estado de México durante el gobierno del ahora presidente de la República, Enrique Peña Nieto. 

El perito de San Pedro bajo la lupa

En los próximos días los reflectores regresarán con el perito que contrató el Municipio de San Pedro, para acreditar el riesgo que existe en la Torre Tanarah y fundamentar su decisión de demolerla.

En el Juzgado donde se lleva la disputa legal, entre la Desarrolladora Trinity y el Municipio de San Pedro, como parte del expediente existe una carta firmada por el perito Manuel Sáenz de Miera.

Nos aseguran que el experto no quiso ratificar ante el Juez su peritaje, donde concluye que el edificio presenta fallas estructurales que ponen en riesgo la zona.

El perito del Distrito Federal asegura en su escrito que el dictamen que elaboró  se basó en unos planos que el Municipio de San Pedro le entregó.

Y aclaró que el peritaje no está concluido, por lo que recomienda que se termine su investigación.

Si el perito se retracta de su dicho dejará muy mal parada a la administración municipal de San Pedro, que encabeza el alcalde Ugo Ruiz.

Que Segob anda desatada en NL

Se dice que viejas prácticas de la Secretaría de Gobernación han empezado a calar en varios estados del país y que aquí ya lo sintieron varios empresarios regios de medios de comunicación.

Y es que también está claro para todos que la calidad y la regulación de los tiempos de contenidos en medios electrónicos son letra muerta en todo el país, y aquí  es obvio que no es la excepción.

Nos cuentan que nuevamente la Segob está tratando de modular algunos contenidos de medios electrónicos y que le cayeron a una estación de radio y a una televisora local.

Que porque el tiempo de los contenidos, comparado con el periodo de comerciales, nomás no cuadra con lo que establece la ley.

Que se pasan de comercialización y reducen los contenidos de sus programas.

Eso es por un lado, pero que por el otro, la Segob también está metiendo su cuchara en cuanto a la calidad de ciertos contenidos, que son muy fuertes para los horarios en los que se transmiten y que además utilizan lenguaje soez.

Incluso, Gobernación estableció una multa económica a la estación de radio por las groserías que dice un locutor al aire durante las mañanas.

Y a la televisora le ordenó retirar una gran tajada de comercialización que ya estaba agendada y que significó una pérdida monetaria importante, porque tuvo que recortar el contrato que ya tenía con los anunciantes.