El juicio contra el juez suspendido por el Consejo de la Judicatura, Luis Armando Jerezano Treviño, fue programado por una Corte del Condado de Hidalgo, Texas, hasta el próximo mes de noviembre.
Esto prorroga muchísimo la suerte de Jerezano Treviño en Estados Unidos para que responda por los cargos de lavando de dinero que le hizo la DEA ante la justicia.
Todo, luego de que se comprobó que el juez y su esposa habrían estado operando una cuenta bancaria abierta en McAllen, Texas, donde Jerezano Treviño llegó a tener cerca de 1 millón de dólares.
Dinero que le fue depositado por un operador de un narcotraficante que trabajaba para el Cártel del Golfo, concretamente cuando esa organización delictiva era dirigida por Juan García Ábrego, fundador de ese grupo, junto con su tío, Juan Nepomuceno Guerra.
El depósito del dinero a la cuenta de Jerezano Treviño y su esposa, coincide con el periodo en que aún como juez activo en Torreón, Coahuila, éste le concedió un amparo a gente del Cártel del Golfo.
El recurso fue para que recuperaran varias propiedades que habían sido confiscadas por la Procuraduría General de la República a García Ábrego.
Cabildo de San Pedro con más atribuciones
El nuevo Reglamento de Desarrollo Urbano de San Pedro contempla que la Comisión de Desarrollo Sustentable del Cabildo tenga la opción de vetar los dictámenes de la dependencia que rige esa materia municipal.
Aunque la administración de Ugo Ruiz buscó que sea una dependencia que conozca el tema de desarrollo urbano perfectamente.
Esto, para que no sean los regidores y síndicos, que a veces no conocen el tema, quienes tomen las decisiones importantes. Pero el proyecto de reglamento sí da más relevancia a los criterios del Cabildo.
Este reglamento, que podría someterse a votación dentro de un mes aproximadamente, permitiría a los regidores y síndicos tener su propio criterio y votar, sin necesidad de tomar en cuenta el dictamen de la Secretaría de Desarrollo Sustentable.
¿Qué hará Javier flores en la subprocuraduría?
Con la implementación de la reforma de justicia y el nuevo sistema penal acusatorio, el procurador Adrián de la Garza ya le dio más atribuciones a su hermanito Iván de la Garza.
Es decir, primero lo contrató, luego lo ayudó a mantenerse en la chamba colocándolo como director del Instituto de Formación Profesional de la dependencia, y ahora le da más atribuciones, incluso, que el subprocurador de Ministerios Públicos.
Javier Flores todavía no sabe qué va a hacer en su cargo.
Y es que ahora, en lugar de la dirección de Averiguaciones Previas y de la dirección de Control de Procesos, que dependían del subprocurador, hay tres direcciones de fiscalías regionales con sus encargados.
Gente que ha estado más en contacto con el hermanito del procurador y que ahora no tendrá que reportar a Javier Flores.
Ahora hay regiones de fiscales: Norte, Centro y sur.
Además están los CODE, Centros de Orientación y Denuncia, que tampoco tendrán que reportar a un subprocurador de Ministerios Públicos según el nuevo esquema.
Es decir, que con esta reestructuración, Iván de la Garza tendrá más asuntos en su área, que ve la reforma penal, que el propio subprocurador Javier Flores.
Si dejan al subprocurador continuar ahí, en la medida que avanza la implementación del nuevo sistema penal, irá desapareciendo el trabajo de Javier Flores.