Diversas organizaciones han criticado la actuación en contra de los profesores que acudían a hacer sus labores
“No es posible que los maestros que valientemente acudieron a cumplir con su labor educativa queden a merced de estos agresores”
Luego de que manifestantes que están en contra de la Reforma Educativa raparon y humillaron públicamente el martes a directores y supervisores de escuelas de Chiapas, la CNTE se deslindó del acto que causó fuerte rechazo en la sociedad.
Las agresiones se le imputan a Organización Popular Independiente Emiliano Zapata (OPIEZ), integrada por comerciantes ambulantes y vinculada con el magisterio disidente.
El acto fue calificado como cobarde. Los sindicalizados permitieron que los profesores caminaran descalzos a los maestros y maestras y les hicieron portar unas cartulinas con leyendas como “traidor a la patria”.
No es la primera vez que los sindicalistas rapan a los agremiados que no comulgan con su causa.
El año pasado, también en el estado de Chiapas, la aspirante Nayeli Mijangos buscaba hacer el examen en esa entidad para ingresar al nivel medio superior. Los agremiados a la CNTE la acosaron, agredieron y también la raparon.
“Uno pareciera ser que ya no puede transitar libremente por la calle sin tener el temor de ser violentado con los maestros”, dijo en entrevista con Radio Fórmula en julio de 2015, donde narró el incidente.
La CNTE indicó ayer que quienes raparon a los profesores fueron infiltrados en su movimiento.
“Condenamos esta acción, toda vez que ha sido realizada por agentes infiltrados del Estado al interior de nuestro movimiento con el claro propósito de desprestigiar, de deslegitimar la justa lucha de los trabajadores”, mencionó en entrevista con Carlos Loret de Mola el secretario general suplente de la Sección 7, Manuel Mendoza Vázquez.
La CNTE no ha acreditado pruebas de esos dichos.
En tanto, la Unión Nacional de Padres de Familia (UNPF) calificó de lamentables e inadmisibles las agresiones a maestros de Chiapas, por parte de integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) en esa entidad.
La presidenta del organismo, Consuelo Mendoza García, llamó al gobernador de la entidad, Manuel Velasco Coello, a aplicar todo el peso de la ley contra los agresores de los maestros, para que este caso no quede impune.
“No es posible que los maestros que valientemente acudieron a cumplir con su labor educativa queden a merced de estos agresores que se hacen llamar maestros, sin que la autoridad haga algo por protegerlos”, expuso en un comunicado.
La organización Mexicanos Primero pidió que se investiguen los hechos ocurridos en Chiapas, con los maestros que fueron agredidos por integrantes de la CNTE, se finquen responsabilidades y se garantice la reparación debida a los afectados.
Además, puso a disposición el correo info@mexicanosprimero.org para los docentes que requieran orientación y asistencia jurídica al respecto.
El secretario de Educación Pública, Aurelio Nuño, refrendó que habrá diálogo con la CNTE hasta que se frenen prácticas denigrantes como las registradas en Chiapas contra maestros, y cuando se acepte la Reforma Educativa.
Cae un agresor
La Fiscalía de Chiapas dio a conocer que un agresor ubicado como Santiago Calvo fue detenido, lo que provocó protestas del grupo disidente.
Elementos de la PGJE detuvieron en las últimas horas a Santiago Calvo López y/o Santiago López Calvo, por su presunta participación en los hechos registrados en Comitán en agravio de maestros que no participan en el movimiento magisterial que encabeza la CNTE.
De acuerdo con las investigaciones, el hombre privó de la libertad a las víctimas a quienes sacaron con violencia de un inmueble, acompañado de un grupo de alrededor de 80 agremiados de la Organización Popular Independiente Emiliano Zapata (OPIEZ), integrada principalmente por comerciantes ambulantes.
Según lo manifestado por los agraviados, Santiago Calvo López encabezó la privación ilegal de la libertad, indicó en un comunicado la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE).
Posteriormente, las víctimas sufrieron presión psicológica al cortarles el cabello, ser obligadas a portar pancartas y caminar descalzas en represalia a su negativa de participar en el paro de labores. (Notimex)