Después de la impactante ceremonia inaugural que todavía la traigo clavada entre ceja y ceja de lo que ya pasó a la memoria y que seguro se me va a quedar en el corazón, no puedo dejar de recordar la combinación de lo emotivo y lo solemne.
Esto va en la historia riquísima de Gran Bretaña, mezclada con la fantasía de los personajes míticos, Alicia en el País de las Maravillas, Peter Pan, Mary Poppins que muchos apenas se enteraron de rebote que no son invento de Walt Disney sino creación de la muy basta y rica literatura británica.
Después me impactó la forma en la que ellos consienten a su Reina Isabel.
Cuando el sonido local en las pantallas nos presentaron su imagen desde el despacho en el Palacio de Buckingham en donde fue escoltada por el mítico James Bond hasta un helicóptero y luego su presencia en el estadio, la ovación y el reconocimiento no se hizo esperar.
Y un poco más adelante, sin duda a la hora de portar la bandera olímpica y llegar al asta, la presencia del más grande de todos, Mohamed Ali, que se llevó la segunda ovación de la noche.
Y luego las delegaciones desfilando con su espontaneidad y frescura y el evento terminaría con el apoteósico homenaje al grande de siempre, Sir Paul McCartney, quien nos levantó de los asientos, todo esto con una acompasada música que todavía ahora me recorre las venas.
Tuve que poner el despertador
Para levantarme temprano y estar listo para subirme al subway y con un solo cambio de estación llegar al Parque Olímpico y ahí caminar, caminar y caminar más, para alcanzar el Centro Acuático que de verdad luce impresionante. Cierto que los chinos se habían volado la barda con el famoso “Cubo de Agua”, pero Londres 2012 no se queda atrás, aunque debo reconocer que le encontré un par de defectos y conste que no me gusta ser tan puntualmente quisquilloso, pero ahí les va: de entrada las tribunas muy verticales impiden a los que gastaron una buena lana y están en la parte de arriba, no solamente ver con comodidad, sino que se pierden una parte del espectáculo, pero lo peor de todo es el tremendo calor nivel sauna que se siente principalmente en la parte alta de la alberca, si tomamos en cuenta que el aire caliente siempre tiende ir hacia arriba (lección bien aprendida en mis cursos de física en secundaria), la humedad es a ratos insoportable, pero conste, esto tiene que ver con el reglamento puntual de la Federación Internacional de Natación que no permite corrientes de aire ni cambios bruscos de temperatura.
Todo sea por ver a Michael Phelps
Nada más apareció para su heat eliminatorio y la ovación, los gritos de júbilo y asombro no se hicieron esperar. Phelps respondió con una sonrisa y con un espontáneo saludo mucho más relajado de lo que ocurrió hace cuatro años en Beijing, se lanzó a la alberca, ganó su heat eliminatorio y hasta ahí parecía que tenía controlada la situación, de hecho mucha gente se salió a comprar algunas botellas de agua y quizá no advirtieron que el tiempo de Michael Phelps solamente le alcanzaba para un octavo lugar, lo que significa tener que nadar en el peor de los carriles, mucha filosofía del propio Michael en la conferencia de prensa donde señaló que eso no le preocupaba, porque nadie ha ganado una competencia en una eliminatoria.
Se le vino la noche
Londres en verano tiene un día muy largo, así que para los eventos de la noche todavía teníamos sol para rato.
Llegaron a la competencia final del 4×100 combinado, el gran favorito Ryan Lochte que tampoco había calificado adelante, de hecho el mejor tiempo lo había conseguido el japonés Kosuke Hagino y muy cerca de ellos Thiago Pereira, el campeonísimo brasileño.
Al final del camino Lochte le entrega la primera medalla a la delegación de Estados Unidos como estaba pronosticada, aunque ésta se esperaba que la obtuviera Phelps, la ventaja de cerca de cuatro segundos del norteamericano sobre Pereira es un mundo para una final olímpica y ahí cerquita el japonés Hagino se queda con el bronce como para decir aquí estoy y fuera de las medallas con mucha frustración el favorito de todos Michael Phelps.
Así las cosas pues, hoy la historia se escribe en el Centro Acuático convertido en sauna y ya platicaremos de otros récords, y de verdad el viernes la inauguración estuvo maravillosa y ver a Phelps como sea son un privilegio… Así de fácil.
Gio: Las razones del ‘Flaco’
Tuve la oportunidad de platicar con Luis Fernando Tena después del partido de México contra Gabón y hacerle un par de preguntas y esto es lo que nos dijo:
-Luis Fernando, dos preguntas: La defensa, es el mejor partido que le he visto ¿y Giovani en la banca no es un lujo?
-“Yo creo que no hablaría de la defensa sino del sistema defensivo, porque Oribe y Marco son los que empiezan a corretear y hacen un gran desgaste, Aquino y Ponce tienen que venir de atrás. Yo pienso que los partidos los tenemos que trabajar, estos juegos que son tan parejos, tan fuertes y no pensar que a los 20 minutos vamos ir ganando 3-0, se definen al final. Tenemos en Gio un jugador que cada vez está mejor, en lo futbolístico y físicamente va mejorando, ha demostrado que entrando en cambios es bastante bueno, el revulsivo que es en lo futbolístico y en lo psicológico para el rival y para su propio equipo, eso no quiere decir que siempre va a entrar de cambio, como ha mejorado es probable que pueda iniciar un partido, pero insisto, hay que trabajar el juego.”
Me gusta gritar
Hablé con Carlos Salcido y así respondió a la pregunta: ¿nada como la victoria?
-“Siempre es bonito ganar, esa es la realidad, pero creo que tenemos que mejorar muchas cosas. Como siempre un resultado así te da un poco de tranquilidad, pero bueno, es futbol y las cosas que hay que mejorar son futbolísticas, entonces hay que seguir trabajando.”
-Juegos Olímpicos, ¿Que te movió?
“El saber que es futbol. (Olímpicos) Es una cosa que no había jugado, no había tenido la oportunidad y que bueno que a esta edad se me esté brindando la oportunidad, ojalá que me vaya bien.”