Diego Armando Maradona anuncia con el desparpajo que siempre le ha acompañado, su intención de lanzarse a la mismísima presidencia de FIFA.
El ídolo argentino sigue sin encontrar la forma de mantenerse vigente dentro del mundo del futbol al que una vez tuvo en un puño.
Su carrera como director técnico fue un enorme fracaso después de que le cedieron la selección albiceleste como una papa caliente en 2010, justamente aquellos a los que llamaba…
‘Ladrones hijos de puta’
La presión mediática, después de una muy sufrida eliminatoria, le dejaron el camino a quién se candidateó solo, convenció al aficionado promedio, enamoró a algunos medio$ locale$ que vieron en esto una mina de oro de la que después nada sacaron.
Luego lo llevaron a DUBAI, en donde le dieron todo, hasta una mansión en una isla artificial, de hecho en los “Tours” turísticos la Mansión de Maradona era una parada obligada para que los turistas se bajaran a tomarse fotos al frente de este palacio.
Ahí cobraba muy bien y en dólares, que seguramente se quedaban en alguno de los muchos bancos que la mafia Blatter ha utilizado en algún paraíso fiscal.
Sus escapadas ante la monótona vida austera que el impusieron en el Emirato no solo a la espectacular vida nocturna de Dubai, sino más allá de las fronteras, apareciendo de repente en Buenos Aires para luego con cualquier pretexto justificar estas ausencias que seguramente al grupo le servían más que cuando dirigía el “10”, que de esto de ser técnico nada más no sabe nada.
Cierto, fue un maestro en la cancha pero eso no basta, el mundo del fut está lleno de exfiguras que han fracasado a la hora de buscar ser técnicos y viceversa, hay muchos que como jugadores apenas alcanzaron el promedio y como técnicos son sensacionales, la vida es así.
Sus amigas las drogas
Sin hacer leña de el árbol caído, baste recordar el daño irremediable que el Diego le hizo al futbol con sus adicciones a las drogas y su terquedad al mentir hasta las lágrimas, arrastrando con esa mentira a millones de fans en Argentina en donde lo han endiosado al nivel de Evita o Gardel, y muchos millones en el mundo entero que vimos cómo el figurón se iba cayendo a pedacitos.
En aquel 1994 durante el Mundial en Estados Unidos, Maradona toca fondo dando positivo en el antidoping por sustancias peligrosas de medicación para mejorar fisicamente y su adicción a la cocaína, lo que negó jurando hasta por sus hijas, aduciendo un complot de “Estos hijos de Puta “ que, decía el “10”, tratan de perjudicarme a toda costa.
Meses después la verdad aparecía por sí sola, lo convencen de ir una de tantas veces a las clínicas de rehabilitación a las que tristemente vuelve otra vez, la muerte le rondaba por una especie de suicidio al continuar con sus vicios y su exceso en la comida, afortunadamente el Diego ha logrado superar el ataque de sus adicciones.
Darle a Diego Armando Maradona la estafeta de FIFA es peor que entregar la Iglesia en manos de Lutero… Así de fácil.
Elemento de no pertenencia
Mientras que otros de su nivel, Pelé (del que vive eternamente acomplejado autonombrándose superior al brasileño) Zidane, Cruyff, Beckenbauer o Platini, han sabido trascender y permanecer en el medio, El Diego no encuentra su sitio.
Lo de técnico ya vimos que no se le da, lo de directivo sin responsabilidades en Boca resultó un fracaso, su falta de preparación lo lleva a cometer muchos errores que solo su tremenda trayectoria lo saca de apuros.
Hoy muestra si interés por suceder a Joseph Blatter, algunos chistosones dicen que “porque se ve que ahí en FIFA hay mucha plata”, otros comentan que en verdad Diego cree que puede, y los más, yo entre ellos, vemos esto como otra de sus muchas fantasías hasta delirantes.
Diego se enfrentó al sistema FIFA pero no por alguna injusticia, Joao Havelange en su momento comentó que castigar a Maradona era para FIFA y el futbol un golpe terrible de falta de credibilidad, sino por una culpabilidad manifiesta, es más, el gol más famoso de MARADONA lo mete con la mano y Argentina ha hecho de este gol un monumento al engaño y a la trampa.