Las 7 llaves mágicas

Hace exactamente un año me tocó coincidir con una amiga que me habló sobre las 7 herramientas del amor. Me dijo que le eran sumamente útiles para lidiar con cualquier tipo de circunstancia y que aplicándolas encontraba la solución a todos sus problemas. 

En pocas palabras, eran las llaves de la felicidad. 

Hoy les puedo decir que por lo que veo en ella y por experiencia propia, estas leyes sí funcionan. 

Annette Manautou Annette Manautou Publicado el
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Hace exactamente un año me tocó coincidir con una amiga que me habló sobre las 7 herramientas del amor. Me dijo que le eran sumamente útiles para lidiar con cualquier tipo de circunstancia y que aplicándolas encontraba la solución a todos sus problemas. 

En pocas palabras, eran las llaves de la felicidad. 

Hoy les puedo decir que por lo que veo en ella y por experiencia propia, estas leyes sí funcionan. 

Ya no tienen que ir a pedirle consejos a una amiga, ni visitar a una bruja o a un psiquiatra para que les digan qué hacer en los momentos difíciles pues utilizándolas, les aseguro una vida llena de paz y felicidad.

Gerardo Shmedling creó estas 7 Herramientas de Amor, que permiten trascender el destino personal. La sabiduría se encuentra en el manejo de las mismas.

Primera ley: ACEPTAR

Aceptar una situación significa dejar de luchar para tratar de cambiarla, haber comprendido que la situación es la que “corresponde” y es el resultado de una actitud interna. Renuncio a querer cambiar a los demás, trabajo en los cambios que puedo hacer en mí mismo.

Segunda ley: ASUMIR

Asumir significa dejar de culpar a los demás por las situaciones que nos corresponde vivir, por el resultado de las decisiones que libremente tomamos y por los sentimientos y emociones que experimentamos. Renuncio a culpar a los demás, asumo mi responsabilidad.

Tercera ley: ACTUAR

Esto significa que, ante cualquier situación o circunstancia, por difícil que sea, lo único eficiente que realmente podemos hacer, es actuar desde la serenidad interior, haciendo lo mejor que podamos con los elementos disponibles. Renuncio a agredir, actúo con serenidad.

Cuarta ley: AGRADECIMIENTO

Es renunciar a sufrir por las dificultades y comprendiendo la gran oportunidad que existe en todo aquello que representa algún grado de dificultad, porque permite el desarrollo de las virtudes internas. Renuncio a sufrir por las dificultades, agradezco lo que aprendo de ellas.

Quinta ley: VALORAR

Te invita a mantener la capacidad de reconocer el inmenso valor que tienen todas las cosas que la vida nos ha dado, ya que solamente podemos usar lo que tenemos, lo cual es exactamente igual a lo que necesitamos. Renuncio a quejarme y valoro todo lo que tengo.

Sexta ley: RESPETAR

Simboliza comprender que todas las personas tienen derecho a sus propias formas de pensar y a tener diferentes gustos, creencias, costumbres, actitudes, comportamientos, funciones, destinos y misiones. Renuncio a criticar a los demás y a interferir en sus destinos, los acepto tal y como son, sin quererlos cambiar.

Séptima ley: ADAPTARSE

Representa comprender, que el lugar y las circunstancias donde se desenvuelven nuestras experiencias de vida, siempre son perfectas para el propósito de Amor que nos trajo al lugar y a las relaciones que actualmente tenemos. Renuncio a huir del lugar que me corresponde, me adapto a él.

La sabiduría consiste es disfrutar el aprendizaje. Quien es feliz con lo que tiene, tiene la capacidad de ser feliz con todo.

“Cuando bailas, tu objetivo no es ir a un lugar determinado de la pista sino disfrutar cada paso del camino” dijo Wayne Dyer.

A partir de hoy solo piensa lo mejor, solo di lo adecuado y solo haz lo necesario.

 Annette Manautou

@annettemr

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