Meter a los que jueguen mejor en el momento sin importar euros, blasones o medallas. Lo cierto es que los candados funcionaron y al Tri, al cuerpo técnico, a los directivos, mercadólogos, patrocinadores, televisoras, a nosotros, a los millones de aficionados nos regresa el alma al cuerpo
LA CORBATA DE LAVOLPE
No sé si fue el regaño que le pusieron en casa de Justino en aquella reunión que de misteriosa no tuvo nada, o el haber visto videos del mejor momento del Tri en los últimos años con Ricardo Lavolpe al frente con todo y su corbata de la buena suerte, aquella de dragones que de tanto utilizarla cargaba hasta manchas de yema de huevo del desayuno, pero como Ricardo no dejaba nada sin analizar a lo mejor era el símbolo de los “güevos” que cada jugador debía de poner en cada partido. Quizá sea también la semanita que se tomó de descanso para analizar el regaño que al más puro estilo del México Revolucionario cuando se daba con el tradicional “palo y pan” , regaño y apapacho, por aquello del espaldarazo condicionado a generar cambios y revulsivos, hoy “Chepo” regresa al look con candado tratando quizá de emular a los galanazos Brad Pitt o George Clooney o ¿why not?, el misterioso look de Sean Penn o del maquiavélico Cardenal Richelieu, a quien quiera que haya querido emular “Chepo”, regresa al look de la buena suerte, al de los dos años mágicos, 2011 y 2012, total, si Lavolpe tenía su corbata de buena suerte, “Chepo” tiene su candado como amuleto.
LOS OTROS CANDADOS
Aparecen entonces los otros candados de “Chepo”, los que cuentan más allá de cábalas y supersticiones, los candados futboleros, los de la cancha, los principios fundamentales, quitándose las presiones y los tabúes de no tocar ni con el pétalo de una rosa a los intocables consentidos por la mercadotécnia, o el tema de los naturalizados o no, a pesar de las ronchas que le puedan salir a los amargados patrioteros que se rasgan vestiduras y se le tiran a la yugular ante lo obvio, todos somos mexicanos, naturalizados y nacidos en nuestro queridísimo territorio, la convocatoria de “Chaco” y Damián genera de inmediato la elemental competencia dentro del grupo, los hoy convocados y los por esta vez marginados, “europeos” incluidos. La máxima elemental del técnico exitoso de poner a jugar a los que están en su mejor momento, mensaje directo al interior del grupo que obliga a los que vivían en su zona de confort a preocuparse y regresar al trabajo y disciplina de grupo.
ORIBE POR ‘CHICHARITO’
Mucha gente me cuestiona si esta propuesta que vengo lanzando desde hace semanas y desde mi humilde trinchera es tendenciosa, o si traigo algo contra “Chicharito”, nada de eso, lo respeto y reconozco su esfuerzo y éxito, sólo que, como decía Vicente Fox “hoy, hoy, hoy…” Oribe pasa por mejor momento que el tapatío del Manchester, quién además de no jugar, sufre una lesión, lo mismo en el caso Andrés Guardado. Hoy por hoy pesa más en el Tri “Chaco” con su estilo, personalidad, adaptándose al equipo y no esperando lo contrario, por ahí Angel Reyna que pasa por un gran nivel y…
EL CAMBIO CON MENSAJE FUERTE
Sacar del campo a Giovanni a pesar de que anoche dio su mejor partido en muchos meses, metiendo en su lugar a Damián Álvarez, ávido de oportunidades en nuestro Tri, este movimiento totalmente inconcebible en el reciente verano manda mensaje mas rápido que un twitter a todos aquellos que se sentían, hasta anoche, con un puesto seguro gracias a glorias anteriores y no a lo que hoy están haciendo. A partir de hoy y con el fundamento del regreso a las bases en las que no deben contar ni los privilegiados cobijados por los anunciantes o las televisoras ni los que más grillan, ni los que ganan en euros, ni los consentidos de algún promotor vivales, hoy el mensaje ( ojalá y así sea) es claro, aquí jugarán los que estén mejor en el momento.
REGRESA EL ‘FUT’ AL TRI
Los nuestros arrancan sin los miedos, dudas, personalismos y mediocridades que nos acompañaron en los últimos meses, aparece como el buen futbol, el acompañamiento, las coberturas, los espacios trabajados, las oportunidades buscadas y perseguidas como en el golazo de Oribe, adivinando el regreso de un balón al portero marfileño, virtud muy de Oribe que sale a darlo todo en cada jugada. Hoy por hoy es el delantero mexicano más peligroso, el que marca diferencias, antes las jugadas futboleras con llegadas constantes como la que provoca el autogol que nos da el primer gol del partido entre Ángel Reyna–Oribe – “Chaco”, el tercero es también consecuencia del buen futbol desplegado por el Tri con el centro por derecha de Reyna que remata entrando como obús sí, ¿quién mas? Peralta.
Y ya para terminar el partido llega la justicia futbolera hecha gol para Ángel Reyna que así rubrica un partidazo.
¡QUE SIGAN LOS CANDADOS!
Así las cosas pues, el regreso de “Chepo” a sus candados, el de estilo modernizado del maquiavélico Richelieu y los que cuentan, los futboleros sacudiéndose miedos, temor al “que dirán”, regresar a las bases, y con esto la alegría, juego de conjunto, disiciplina táctica y la convicción del técnico a sus jugadores y del plantel al Chepo… Así de fácil