Los doctores de la automatización
Requerimos técnicos especialistas. Técnicos en sistemas de cómputo. Técnicos que solucionen nuestra comunicación digital. Técnicos en todo lo que sube, baja, se mueve, se desplaza y nos desplaza.
Hay una pelea por la mano calificada en todos los sectores de la producción. Sin embargo, las carreras técnicas en México, y quienes eligen cursarlas, no muestran que el mercado esté preparándose para un milenio a manos de las máquinas.
Marcela Garza AguirreRequerimos técnicos especialistas. Técnicos en sistemas de cómputo. Técnicos que solucionen nuestra comunicación digital. Técnicos en todo lo que sube, baja, se mueve, se desplaza y nos desplaza.
Hay una pelea por la mano calificada en todos los sectores de la producción. Sin embargo, las carreras técnicas en México, y quienes eligen cursarlas, no muestran que el mercado esté preparándose para un milenio a manos de las máquinas.
En el ciclo 2010-2011, casi tres millones de jóvenes se matricularon en educación superior, que incluye licenciatura, posgrado o carrera técnica. De estos, el 3.8 por ciento optó por una carrera técnica, mientras que el 89.2 por ciento optó por una licenciatura universitaria, tecnológica o normal.
En México, estudiar en una universidad y completar una carrera profesional tiene cierto reconocimiento social. Estos prejuicios sociales arrastran a las familias a sacrificar sus recursos, para que los hijos sean llamados licenciados o ingenieros. Pero al finalizar sus estudios muchos de ellos no encuentran trabajo.
Este problema no es solo de México. En Estados Unidos se detectó que los estudiantes que se endeudan para pagar sus carreras universitarias no logran, con sus trabajos, pagar los préstamos. Esto ha puesto en duda la necesidad de estudiar una carrera profesional.
El mundo laboral ha dado un giro. Cuando antes se quería todólogos, personas que supieran un poco de cada área, ahora se busca especialistas, gente que domine y sea experto en una cosa.
Los títulos nobiliarios están desapareciendo. Aun las monarquías vivas, están contando sus últimos días. Lo de ahora no es qué título llevas, sino qué problema sabes solucionar y qué tan bueno eres haciéndolo.
Verdaderos profesionales son aquellos que dominan su área y permiten que los sectores productivos se muevan. Los técnicos son el motor económico del nuevo milenio. Y son los que hoy, cual doctores, cobran bien sus servicios y tienen las mayores posibilidades de desarrollo profesional.
Ante nuestra realidad digital y automatizada, los técnicos no son una opción, son una necesidad, y deberíamos estarnos preparando para ello.
Motivar a más jóvenes a elegir esta opción y dar en las escuelas una verdadera educación técnica de punta, puede ser la carta social para elevar el nivel de vida de más mexicanos.
No cabe duda que los técnicos son los nuevos doctores de la automatización.