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Este sábado en el icónico MGM de Las Vegas, el gran “Manny” Pacquiao subirá al ring como amplio favorito en la llamada “Pacquiao-Bradley III”, en coloquial lenguaje vulgar, la tercera pelea entre estos dos grandes boxeadores quienes están en el ocaso de sus carreras, en donde la historia….
Comienza con dos robos
A aquella función celebrada el 9 de junio del 2012 se le llamó “La Tormenta perfecta”, en alusión a la película del mismo nombre entonces en boga.
“Manny” venía de aquella épica pelea de noviembre del 2011 cuando en un auténtico asalto, robo descarado, le regalaron la decisión ante nuestro Juan Manuel Márquez, y que daría pié a la inolvidable para todos “Márquez Pacquiao IV”.
A los que somos “Márquez fans” ese fue un combate inolvidable, porque al fin se hizo justicia en aquel golpazo a contragolpe con todo el deseo, pasión y rencor de millones de mexicanos que habíamos visto con indignación el robo en la pelea anterior, derechazo al costado que puso a “Manny” a ver estrellitas tirado en la lona.
Pero aquella pelea aún no estaba ni en la imaginación de lo promotores, aún estaba caliente la sensación del robo a Márquez en “la III”.
A Timothy Bradley solo lo vieron ganar su familia, sus cuates y quizá no todos y, lo más importante, dos de los tres jueces que sancionaron este Cochupo descarado.
De todas formas a “Manny” le dieron cuatro meses después una probadota de la receta de tranzas y mañas con que le regalaron la “III” con Márquez.
El otro cochupo de ‘Manny’…
Sin duda alguna se da hace unos meses, el pasado 12 de mayo, cuando los dos más taquilleros del planeta, Pacquiao y Floyd Mayweather, protagonizan la llamada, como tantas otras, “pelea del siglo”, con récords por todos lados.
Este combate registró 4.6 millones de Pago Por Evento vendidos a promedios cercanos a los 100 dólares, venta total de 410 millones de dólares, la transmisión el Filipinas superó el 90 por ciento de hogares con TV encendida en ese canal, boletos de mil 500 a los 32 mil dólares, ambos boxeadores se repartieron alrededor de 300 millones de dólares.
La función tuvo una atracción de televidentes rompiendo récords en todo el planeta, todo fue en grande, hubo alfombra roja para más de 150 súper VIP de todos los ámbitos.
La indignación fue creciendo a tal grado que hubo quien demandó al MGM por semejante farsa.
“Manny” salió a decir que subió lesionado del hombro y ahí más demandas, fue un robo descarado del que el boxeo aún no se repone, luego de aquella noche histórica que pudo reconciliar a millones con este deporte de los tantos cochupos.
El pescado muere por su boca
Hace un par de meses en un discurso en la campaña para el Senado de su país, “Manny” se lanza hablando antes de pensar:
“Las mujeres están hechas para los hombres y los hombres están hechos para las mujeres… ¿Ven a animales manteniendo relaciones homosexuales? Los animales son mejores, saben distinguir entre hombres y mujeres”, traducido del tagalo, idioma local filipino.
“Si aprobamos (el sexo de) hombres con hombres y mujeres con mujeres, eso significa que el hombre es peor que un animal” remató “Manny”.
Las reacciones de rechazo de todos calibres se multiplicaron exponencialmente, no solo de grandes personalidades, sino de la gente común tanto en Filipinas como en todo el planeta, al grado de postear un tuit ofreciendo disculpas, pero el daño ya estaba hecho.
Voto de castigo
Un poco de cada cosa, la exageración mercadológica de la “III” contra Bradley, a quien le ha ganado las otras dos salvo, el cochupo de la “II”.
Su farsa en la pelea con Mayweather al engañar a millones en todo el mundo con una pelea (hay que llamarle de alguna manera) aburrida y ridícula.
Sus comentarios homofóbicos, su edad cercana al retiro que lo hace cuidarse y defenderse en exceso sobre el ring, olvidando aquella hambre de ser.
Toda esta mezcla ha hecho que el PPV no alcance ni el millón de telehogares, bares o restaurantes.
Todo esto nos presenta para este sábado una buena y atractiva pelea que hace unos tres años pudo ser fantástica, el tiempo no perdona ni a “Manny” Pacquiao… Así de fácil.
