Miércoles negro para los verdes
A menos de 72 horas de que el comandante supremo elogiara al Ejército Mexicano, las fuerzas armadas fueron víctimas de lo que bien se pudiera calificar como la emboscada perfecta de Michoacán.
Según análisis de expertos en cuestiones de teatro y armas, resulta que los guionistas de la emboscada se propusieron tres objetivos:
El primero, exhibir a las fuerzas que comanda Enrique Peña Nieto como un ejército represor que se opone al “legítimo derecho” del pueblo, a la defensa propia.
Redes de PoderA menos de 72 horas de que el comandante supremo elogiara al Ejército Mexicano, las fuerzas armadas fueron víctimas de lo que bien se pudiera calificar como la emboscada perfecta de Michoacán.
Según análisis de expertos en cuestiones de teatro y armas, resulta que los guionistas de la emboscada se propusieron tres objetivos:
El primero, exhibir a las fuerzas que comanda Enrique Peña Nieto como un ejército represor que se opone al “legítimo derecho” del pueblo, a la defensa propia.
El segundo, hacer ver al general secretario Salvador Cienfuegos como el perdedor de la primera batalla en la campaña de desarme de “autodefensas”, y la protección de la población por falta de exploradores, de inteligencia.
Y el tercero, presentar a los elementos de la Policía Federal, que todavía controla Genaro García Luna, como los mejor preparados para rescatar a un general y 27 soldados del Ejército Mexicano.
En menos de lo que canta un gallo, los federales lograron liberarlos.
¿Por qué los “alzados” sí pudieron llegar rápidamente a un acuerdo con la Policía Federal y no con el Ejército?
Los análisis concluyen que en esta primera batalla, la estrategia mediática desafortunadamente les funcionó a sus autores.
Sin embargo, en vista de los resultados de esta primera experiencia, nos dicen que intensificarán los trabajos de inteligencia para desenmascarar a los expertos en crear problemas, para luego resolverlos.
¿Quién ha venido armando a los guardias “comunitarios” con armas de uso exclusivo del Ejército?
Pese al primer tropezón, se espera que la nueva estrategia para pacificar Michoacán del presidente Peña Nieto ponga en evidencia por qué no funcionó la de Felipe Calderón.
Sabotaje contra el Pacto
A lo mejor porque Enrique Peña Nieto dijo que el Pacto no será para siempre, fue que Vicente Fox ahora quiere colaborar para que acabe rápido.
Y es que en la medida que el guanajuatense siga hablado en favor del Pacto, crecerá la oposición del círculo verde en contra de la reforma fiscal acordada por los firmantes del acuerdo.
Muchos recordarán el trauma nacional por aquel intento frustrado de Fox de obligar a la población a pagar un “IVA copeteado”.