Muerte civil o política

Los empresarios de la Ciudad de México trabajan en una propuesta que va a levantar polvo. Hartos de la corrupción que enfrentan todos los días, la Coparmex capitalina promueve que haya una Ley de Muerte Civil o Muerte Política, para que aquellos servidores públicos que cometan actos de corrupción no puedan volver a ocupar un cargo público el resto de su vida.

La cosa está en que una ley así debe ser aprobada por el Congreso federal y los congresos estatales, así que no hay que ser adivino para saber que los políticos no querrán echarse la soga al cuello para autocondenarse al destierro público si cometen un delito de corrupción.

¿A dónde irá Zamora?

En un segundo puede cambiar toda una vida y eso lo sabe Arturo Zamora, líder de la CNOP, quien hasta hace un par de meses ya tenía planeado entrarle al disfrute de ser abuelo, pero de pronto su proyecto dio un giro, pues resulta que luego de encuestas y pláticas al interior del PRI coincidieron que el único que puede dar la batalla en la elección de Jalisco es él. Y es que hasta le echaron números y si mandan otro gallo es probable que no les alcance para detener a Enrique Alfaro. Atentos.

Asamblea en vilo

Pues resulta que con comunicado, memorándum y otros documentos oficiales la Asamblea Legislativa de la Ciudad de México dijo que regresaría a chambear el 2 de octubre una vez que el dictamen de Protección Civil les dijera que el edificio estaba en buenas condiciones luego del terremoto del 19 de septiembre. La cosa es que a los empleados no les han dicho nada y cuando se presentan a trabajar resulta que aún no es tiempo de ponerse a chambear. Vaya vida la de los legisladores locales.