El problema del tiempo es que no deja correr. Y en ese sentido cuando un momento perdura toma forma y seriedad, se añeja, por tanto gana consistencia.
En Siria, la guerra entre el gobierno de Bashar al- Ásad y los grupos rebeldes ha cobrado ya la vida de unas 400 mil personas . Y en una lección de congruencia política el presidente Obama fue primero criticado y luego recordado que cuando los Estados Unidos emite un ultimátum, este lo debe cumplir.
Barack Obama en una celebre declaración aseguró que había una línea roja, la cual sí era rebasada por el gobierno de Assad el gobierno estadounidense actuaria. El Presidente sirio la cruzo -por mucho- y nada pasó. El establishment norteamericano y el denominado “blob” de la política exterior acertó en que cuando el gobierno no cumple su palabra pierde fuerza y credibilidad.
En ese sentido, y en otra realidad mundana pero más cercana a usted lector, el gobierno mexicano atraviesa por una situación similar.
Y es que frente al pandemonio sociopolítico que trata de sortear el gobierno del presidente Peña Nieto con la CNTE, que en las ultimas semanas cobró la vida de nueve personas, dejado decenas de heridos y millones de ciudadanos afectados; el gobierno a través del secretario de gobernación Miguel Ángel Osorio Chong ha recurrido a todo, principalmente al dialogo. Y eso en el sentido más estricto del actuar democrático resulta muy respetable. Sin embargo, tras innumerables mesas de dialogo, canales de comunicación secundarios y provocaciones –mutuas- la tolerancia del gobierno se agotó.
Al menos, así lo expresó hace cinco días el encargado de la política interior, “el tiempo se agotó” y aseguró que el gobierno actuaria en breve para desactivar los bloqueos carreteros que afectan a millones de ciudadanos.
Bueno, los bloqueos permanecen, el gobierno no actuó. En cambio, le cedió al movimiento magisterial disidente una prorroga informal. Y en un intercambio de diálogo, que llevó a otra mesa de diálogo, el pasado martes se acordó, ¿que cree usted? Si, un encuentro más entre las partes para dialogar el próximo lunes.
Que sí la prorroga fue para evitar otro Noxchitlán o algo peor, quizás. Que sí fue una decisión pensada más desde la óptica política que desde la estratégica, también.
Pero el caso es que, así como en una partida de póker pierdes una mano cuando descubren tu “bluff”, en esta crisis política la mano más alta ahora la tiene la CNTE tras haber sorteado el “bluff” del gobierno.
Miles de niños siguen sin ir a clases, los bloqueos carreteros y las marchas en la Ciudad de México continúan afectando a millones de personas.
Y mientras tanto, pasan las horas y -a propósito del fallecimiento de Don Lupe Tijerina fundador de Los Cadetes de Linares- “aquí no hay novedad”.