Los millones que renunciaron estaban quemados. La Gran Renuncia es, en realidad, El Gran Agotamiento

¡No renuncies nunca!

Lo tenía todo pero, pese a que lo llamaron “loco”, renunció. Había estudiado una maestría en negocios en Harvard y trabajaba para una firma de prestigio en Nueva York. Era el año 2015 y el mexicano Jorge Fernández Gallardo estaba fascinado de ver todo lo que se podía comprar en Estados Unidos a través del […]

Lo tenía todo pero, pese a que lo llamaron “loco”, renunció. Había estudiado una maestría en negocios en Harvard y trabajaba para una firma de prestigio en Nueva York. Era el año 2015 y el mexicano Jorge Fernández Gallardo estaba fascinado de ver todo lo que se podía comprar en Estados Unidos a través del comercio electrónico.

De ahí surgió la idea de emprender en México. “No sabía a lo que me metía”, recuerda entre risas.

La renuncia de Jorge en 2015 para perseguir sus sueños se volvió un fenómeno jamás visto con la pandemia. Hasta 4 millones de personas al mes abandonaron sus trabajos en Estados Unidos en 2021 en lo que se ha llamado La Gran Renuncia.

Lo que parece de locos, en el caso de Jorge y de millones de estadounidenses, tal vez sea todo lo contrario: una toma de conciencia de que nuestra realización no tiene por qué alcanzarse sólo en el desempeño profesional.

Los millones que renunciaron estaban quemados. La Gran Renuncia es, en realidad, El Gran Agotamiento.

En México, uno de los países con los salarios más bajos del mundo, donde se trabaja el mayor número de horas y se tienen menos días de vacaciones al año, La Gran Renuncia no ocurrió.

Sin seguro de desempleo ni certeza de encontrar un mejor trabajo, la mayoría de los mexicanos ha optado por La Gran Resignación. “Tenemos miedo de perder el trabajo seguro”, como dice Lyz Escalante, experta en transformación de competencias.

Por eso me inspira la historia de Jorge. Porque él no quiso llegar a estos extremos. Él siguió su instinto y tomó el riesgo de dejar la zona de confort e ir a la aventura. Así fue como, en 2015, como respuesta a su frustración por el atraso del comercio electrónico en Latinoamérica, fundó Ignite Commerce, con la misión de ayudar a los retailers a ser exitosos en el comercio digital.

No fue nada fácil. En el camino, Jorge tuvo que superar rompimientos con sus socios y quedarse solo al frente de la compañía en tres ocasiones. La última vez lo llevó a cuestionarse todo lo que había hecho. “Tal vez lo estoy haciendo todo mal y tal vez estoy prometiendo la Luna y no puedo cumplir.”

Pero el tiempo pasó y Jorge no se rindió. Uso su capacidad de resiliencia, de encontrarle el lado positivo a las cosas, incluso, como él mismo dice, siendo iluso. “Si no tienes esa creencia es difícil aventarte el brinco”.

Tan bien le fue que en 2019 su empresa se fusionó a Ecomsur, una empresa fundada en Chile en 2011 por Mario Miranda, logrando hoy una presencia regional y un crecimiento acelerado en los últimos dos años.

Para Jorge, la motivación nunca fue hacer dinero. Lo que siempre buscó fue ayudar al avance de México y crear empleos.

Sé que piensas que la historia de Jorge no tiene nada que ver contigo, que te aterra dejar la “seguridad” de tu trabajo actual. Pero hoy nada es seguro: como lo demuestra el incierto y cambiante mundo actual, las cosas pueden cambiar de un día para otro. Así que no esperes más. ¡No te conformes! Renuncia a todo, pero, por favor, a tu sueño no renuncies nunca.

Genaro Mejía es periodista digital y de negocios con más de 20 años de experiencia y LinkedIn Top Voices 2019

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