El escándalo del “gasolinazo” pone al exalcalde priista de Montemorelos, Pablo Elizondo, hoy flamante delegado de la Sedesol, servido en bandeja de plata para el PAN de Nuevo León.
La Auditoría Superior del Estado, que encabeza Sergio Marenco, ya determinó que es una irregularidad los 2 millones de pesos que se le pagaron al escolta de Elizondo por consumo de gasolina.
Desembolsos que curiosamente se realizaron justo antes de que Pablo solicitara licencia para contender como candidato a diputado local del PRI.
La ASE pide iniciar un procedimiento de fincamiento de responsabilidad en contra de Pablo Elizondo.
¿Qué más quiere el PAN, que todavía hasta hoy controla el Congreso con su alianza con el PRD?
Hace una semana precisamente la Sedesol federal no vaciló cuando inhabilitó por 15 años a Miguel Ángel Treviño Sandoval, secretario municipal de Monterrey y operador de la alcaldesa Margarita Arellanes.
Aquí se va a ver si los legisladores locales del PAN son de verdad, o nada más hacen como que son una auténtica oposición, pero para la foto.
También se verá si es verdad que están jugando en bloque con la alcaldesa.
Cambio para la glosa
El PAN de Nuevo León busca aprovechar su mayoría en el Congreso del Estado para llevar a cabo algunos cambios en el formato de la Glosa del Cuarto Informe de Gobierno que presentó el gobernador Rodrigo Medina.
De entrada, los panistas encabezados por su coordinador Alfredo “Freddy” Rodríguez, quieren terminar con las comparecencias vespertinas de los integrantes del gabinete estatal.
Los albiazules están proponiendo que estos encuentros entre los legisladores y funcionarios estatales se lleven a cabo antes del mediodía, para evitar que el tedio y el cansancio jueguen en contra de las repercusiones mediáticas.
Mañosamente los priistas, en su época de oro, programaban la Glosa por la tarde, casi cayendo la noche, para evitar una amplia cobertura en los medios de comunicación.
Hoy eso ya no pasará.
Impugna el PAN rechazo de normas
El Comité Directivo Estatal del PAN ha decidido impugnar el rechazo que hizo el Comité Ejecutivo Nacional albiazul de sus normas complementarias.
Con estas reglas la dirigencia panista intentaba suspender el proceso de afiliación de militantes en Nuevo León.
La semana pasada, el CDE albiazul que encabeza José Alfredo Pérez Bernal, acordó solicitar al CEN que sea el Consejo Nacional, el que resuelva en segunda instancia la facultad para aplicar estas reglas.
De entrada el PAN estatal buscaba con este instrumento jurídico suspender el proceso de afiliación bajo el argumento de que no existen condiciones para la reafiliación en estos momentos.
Era la jugada jurídica para detener las afiliaciones que panistas como Fernando Larrazabal y Arturo Salinas están impulsando en Nuevo León.
Será el Consejo Nacional del PAN el que tendrá que pronunciarse sobre las normas complementarias de Nuevo León.
