En el PRI de Nuevo León las diferencias entre los priistas afines al grupo del exgobernador Rodrigo Medina y priistas contrarios ha pasado de una confrontación de baja intensidad a un pelea frontal y pública por el control del partido.
En un lado están los alcaldes del PRI, Adrián de la Garza y Francisco Cienfuegos, cercanos al exmandatario estatal, y del otro priistas como Héctor Gutiérrez, Felipe Enríquez y Abel Guerra.
El veto que impuso públicamente Felipe Enríquez, secretario de Acción Electoral del CEN tricolor, a Francisco Cienfuegos como próximo coordinador de la bancada priista, hizo evidente la guerra que existe dentro del PRI de Nuevo León.
Hay mucho en juego: no sólo la coordinación en la próxima bancada tricolor, sino también la presidencia del partido y por supuesto la interlocución con el gobernador Jaime Rodríguez.
Pero sobre todo lo que está en juego hoy en día en el Partido Revolucionario Institucional (PRI) es la candidatura tricolor a la gubernatura de Nuevo León en el 2021.
Magistrado con padrinos
Hoy en comisiones en el Congreso del Estado se votará el dictamen para el nombramiento del magistrado que ocupará el puesto que dejó vacante Gustavo Guerrero en el Poder Judicial del Estado ahora que fue designado Fiscal General.
La idea es que mañana en el periodo extraordinario convocado por el Congreso se designe al nuevo magistrado del Tribunal Superior de Justicia
De la terna que envió el Consejo de la Judicatura al Congreso es Alberto Ortega Peza, cuñado de Mauricio Fernández, el que lleva ventaja para ser nombrado próximo magistrado judicial en Nuevo León
Ortega Peza no sólo es apoyado por panistas, por ser cuñado de Fernández, sino también por priistas e incluso por el presidente del Poder Judicial del Estado, Francisco Mendoza.
La jueza Patricia Alejandra Gutiérrez Ramírez, quien también forma parte de la terna, tiene una excelente trayectoria en el Poder Judicial, pero seguramente no tiene los padrinos que presume Ortega Peza para el cargo.
Montiel pisa callos en Fomerrey
Todo indica que el nuevo director ejecutivo de Fomerrey está durmiendo con el enemigo.
En poco tiempo le han generado grilla interna y han tratado de pegarle con información falsa, en donde Eugenio Montiel según gira instrucciones que posteriormente tiene que desmentir públicamente.
Todo apunta a un autor intelectual y a varios voceros al interior del gobierno de Jaime Rodríguez.
¿Será que el exlegislador está pisando callos importantes que buscan desestabilizarlo a toda costa dentro del gobierno del Estado?
Lo que es un hecho es que el nuevo ritmo de trabajo en esta institución es otro a partir de la llegada de Montiel, pues las instrucciones que el gobernador le ha dado son precisas con rumbo al fin del sexenio, por lo que antes de seguir el bombardeo, quizás deberían de pensarla muy bien, no vaya ser que estén generando un boomerang del cual no midan su retorno.
