De planes urbanos y distritos

 

Llamó la atención la cancelación de la consulta del Plan de Desarrollo Urbano 2050 en San Pedro, confirmando que los procedimientos del pasado ya no funcionan actualmente y menos para el futuro que nos alcanza a pasos agigantados.

 

Indira Kempis Indira Kempis Publicado el
Comparte esta nota

 

Llamó la atención la cancelación de la consulta del Plan de Desarrollo Urbano 2050 en San Pedro, confirmando que los procedimientos del pasado ya no funcionan actualmente y menos para el futuro que nos alcanza a pasos agigantados.

 

La planeación urbana tradicional -que tampoco es que tenga tantos años porque es relativamente reciente en México- que recoge el sentido práctico de la verticalidad en la toma de decisiones que a veces depende hasta de “caprichos”.

 

La de la receta técnica, el poder desde el gobierno o en algunas figuras de poder político y la cual los técnicos (si existen, porque en algunos casos no hay personas especializadas en el tema) como ejecutores de planos… 

 

Esta planeación tradicional tendrá que avanzar hacia la colaboración. 

 

La planeación urbana del futuro es colaborativa. En ella importa más el proceso que el resultado. 

 

El reto es difícil porque entonces deberíamos acompañar a estos cambios en tendencia con una cultura de apertura y debate continuo para evitar acuerdos que sólo son de unos cuantos grupos de interés.

 

No se trata de criticar sino de reconocer que la sociedad a su manera ha cambiado y si bien no conoce de desarrollo urbano y muchas veces opina desde el estómago, desde su pasado y en esa visión “texana” de la realidad, se debe entablar un diálogo. 

 

Necesitamos comunicar conceptos complejos de manera simple y que los técnicos no sean obedientes de la burocracia sino gestores de una realidad que necesita ser abrazada y comprendida no solo desde la experiencia técnica sino humana.

 

Abrir y consultar no significa tirarse a las fauces del lobo de la grilla politiquera, sino estratégicamente y con enfoque entender la dimensión social y cultural.

 

Incluso, buscar aliados de la realidad reconociendo que la autoridad no puede sola con el desarrollo urbano. 

 

Requerimos con urgencia buscar cooperadores  que le ayuden a gestar planes colaborativamente, que si bien no estarán exentos de desconfianza, hay que darnos la oportunidad de enfocar y concretar proyectos con seguimiento sin cambios constantes según el estado de ánimo del grupo en turno del poder.

 

Ahí esta el Distrito Tec y el futuro Distrito (legal) U-ERRE Purísima Alameda como ejemplos de que se puede planear-haciendo. 

 

Ahí, una oportunidad de avanzar sin alimentar el veneno mas grande que un gobierno puede tener: la desconfianza institucional en el desarrollo de la urna.

Síguenos en Google News para estar al día
Salir de la versión móvil