La salida de Cristina Díaz de la CNOP, que adelantamos ayer en esta columna, cimbró como un terremoto al priismo de Nuevo León, pero donde pegó más fue en el PRI y en Morones Prieto, en la sede estatal de esta organización.
El más preocupado debe ser Carlos Barona, dirigente estatal de la CNOP, quien fue impuesto por Díaz en esta organización apenas el año pasado.
Pero Barona no es el único que debería de estar nervioso por la llegada de José Murat, un priista de la línea dura, a la CNOP nacional.
En el PRI de Nuevo León la noticia puso a algunos a temblar, como fue el caso de María de Jesús Aguirre, secretaria general del PRI y quien llegó a esta posición gracias a su amiga Cristina Díaz.
Lo mismo pasa con David de la Peña, quien fue nombrado como titular de la Red de Jóvenes por México, por intermediación de Tomás Montoya, hijo de Cristina Díaz.
Monterrey, un pobre municipio
Es una tristeza lo que ocurre con Monterrey, la capital de Nuevo León.
No hace muchos años Monterrey competía con Guadalajara por ser la ciudad más importante del país, después de la Ciudad de México.
Hoy el municipio regiomontano, que gobierna el alcalde Adrián de la Garza, sólo da pena y lástima.
El día de ayer el edil priista anunció (no es broma) que su administración contaba ya con el proyecto para construir un complejo vial en la avenida Garza Sada y Lázaro Cárdenas, pero aclaró que su factibilidad dependía de que la Federación autorizara los 500 millones de pesos que cuestan estas obras viales.
¿No es una vergüenza que la capital de Nuevo León, alguna vez próspera y rica, no tenga dinero para construir siquiera una obra vial digna? ¿Qué su plan de obras dependa de la Federación?
En su primer año, Fernando Larrazabal y Adalberto Madero construyeron cuatro pasos viales. Hasta Margarita Arellanes pudo presumir obra vial en su administración.
¿Y Adrián de la Garza qué puede presumir en año y medio de administración?
¿Montiel a Movimiento Ciudadano?
¿El diputado priista Eugenio Montiel renuncia al PRI para formar parte de la bancada de Movimiento Ciudadano?
Ese era ayer el rumor que circulaba fuerte en el Congreso de Nuevo León. Hace una semana Montiel desconoció a Marco González como su coordinador y esta semana pintó su raya en tribuna.
¿Qué sigue?
Lo lógico: renunciar al PRI y buscar por otro partido, como Movimiento Ciudadano, un puesto de elección popular en el 2018.
¿Será que Montiel apunta a la Alcaldía de Monterrey?
Bloque ‘antiRanchero’ en FCC
En donde se ha formado curiosamente un bloque antiRector es en la Facultad de Comunicación, donde la próxima semana habrá elecciones por la dirección.
Además de Mario Rojo, actual director de la Facultad, que busca reelegirse sin la bendición del rector Rogelio Garza, Iñaki Alzugaray también pretende registrarse en la contienda en contra de la voluntad de “El Ranchero”.
En su campaña para buscar la dirección de la Facultad de Ciencias de la Comunicación, el exdirector del Canal 28 se la pasa diciendo que no aceptó hace un mes un trabajo donde le pagarían 20 mil dólares al mes (400 mil pesos mensuales) porque prefiere ser director de la FCC.
¿Cómo piensa ganar Alzugaray esa cantidad de dinero siendo director de una facultad de la Universidad?
Los malpensados aseguran que la única forma para hacerse de ese dinero en la FCC es haciendo pillerías.
Hoy por cierto se registra Juan Antonio Garza Sánchez, quien tiene como padrino al exrector José Antonio González, “El Tigre Toño”.